El conformismo del Gobierno ante la politización del 17-A espolea a Torra y sus consellers
- La ministra de Justicia, Dolores Delgado, tras las declaraciones de Torra llamando a "atacar al Estado", se limitó a decir que la pancarta contra el Rey es "un tema secundario" que "no quita protagonismo a las víctimas".
- Casado: "Torra no ha respetado ni las 24 horas que pidieron las víctimas"
- La tensa discusión entre Torra y Albiol en pleno homenaje a las víctimas de Cambrils
Torra y sus consellers se han envalentonado en la utilización política de los actos por el primer aniversario de los atentados de Barcelona y Cambrils ante la pasividad e
inacción del Ejecutivo de Pedro Sánchez. El mayor de esos retos lo lanzó el president el viernes por la tarde cuando, tras guardar las formas por la mañana durante el acto central en Barcelona, llamó a dejar de defenderse y "atacar al Estado español", asegurando estar "más fuertes y decididos que nunca para fundar la República Catalana", en palabras durante un acto convocado por Òmnium y ANC junto a la cárcel de Lledoners, donde se encuentra el exconseller de Interior Quim Forn.
Por la noche, la ministra de Justicia, Dolores Delgado, evitó referirse a esa amenaza, en línea con la política de 'paños calientes' del Gobierno con el independentismo, y se limitó a decir que la polémica pancarta contra el Rey en la Plaza Cataluña durante el acto central "no procedía" en un día así pero que es "un tema secundario" que "no quita protagonismo a las víctimas".
La Delegación de Gobierno en Cataluña había pedido la retirada de esa pancarta, no por lo evidente, el ataque al jefe de Estado en un día de homenaje a las víctimas, sino escondiéndose tras argumentos técnicos para no entrar en polémicas y confrontación. En concreto, se alegaron motivos de seguridad, que la pancarta generaba un punto ciego en el despliegue policial.
"Libertad de expresión"
Si en primera instancia la Generalitat respondió a esos argumentos técnicos, que la pancarta no comprometía la seguridad, pasando la 'patata caliente' al Ayuntamiento de Barcelona, este sábado Torra y su conseller de Interior, Miquel Buch, ya no se escondieron y apelaron directamente a la "libertad de expresión".
"Los Mossos protegieron la pancarta contra el Rey cuando unos ciudadanos la quisieron quitar. Forma parte de la libertad de expresión, en ningún caso se puede prohibir. A la delegación ya le haremos llegar el informe que pide", ha dicho Buch. Y de la defensa, el Govern ha pasado al ataque, con nuevas acusaciones veladas contra el CNI, por su papel en la prevención de los atentados.
"Es grave que un año después no haya habido la mínima decencia y respeto a las víctimas por parte del Parlamento español de poner en marcha la comisión de investigación. ¿Por qué esta información vital se ocultó a la policía catalana?", ha denunciado Torra, mientras que el conseller Buch ha recordado que "Satty [imán de Ripoll y cerebro de la célula] no era confidente de los Mossos sino del CNI".
Acusaciones y amenazas varias, por parte de un Govern envalentonado, que a falta de respuesta desde el Ejecutivo de Sánchez han encontrado réplica en el Partido Popular, cuyo líder, Pablo Casado, ha acudido al acto en Cambrils, donde ha sido abucheado, como empieza a convertirse en costumbre en sus apariciones públicas en Cataluña y País Vasco, y ha criticado a Torra por "no respetar ni las 24 horas que habían pedido las víctimas".
"Exigimos a la Generalitat que deje de amenazar a las instituciones y que no permita humillaciones al Jefe del Estado. El PP va a estar defendiendo a España frente a cualquier amenaza; pedimos al PSOE que explique cómo va a responder a esas amenazas".
Rifirrafe con Albiol
Casado ha acudido junto al líder del PP catalán, Xavier García Albiol, a ese acto en Cambrils, en el que la alcaldesa ha tenido palabras de elogio al exconseller Forn, en prisión provisional, así como al ex mayor de los Mossos, Josep Lluis Trapero. Justo antes de ese homenaje, Albiol se había enganchado en un acalorado rifirrafe con Torra, una discusión captada por las cámaras de los medios que cubrían el acto y que ha acabado desviando la atención y robando foco a las víctimas.
"Le he recriminado al president que desde su cargo institucional debería tener otro tipo de comportamiento, no es admisible que pierda las formas y las compostura en un día como hoy", ha explicado después el líder del PP catalán, mientras que Torra, que se ha alejado de Albiol visiblemente airado tras la discusión, ha preferido no comentar lo sucedido alegando que "no es el momento".