El Gobierno no tiene "ninguna constancia" de que Arabia Saudí haya amenazado con paralizar o cancelar el encargo de cinco corbetas por 1.813 millones de euros que dan de comer a 6.000 trabajadores en las instalaciones de Navantia en San Fernando (Cádiz).

Así lo ha advertido este lunes la ministra de Defensa, Margarita Robles, en la Comisión de Defensa del Senado ante las protestas de los trabajadores y las críticas de la oposición, que vinculan la posible suspensión a la decisión de Defensa de paralizar la venta de bombas al país del Golfo Pérsico tras un mortífero ataque de Riad a Yemen. 

"A este Gobierno y a esta ministra le resulta profundamente irresponsable" que haya quien quiera "introducir el miedo en el cuerpo" a los trabajadores de los astilleros, ha dicho. Robles ha atribuido a la "maledicencia" y a la "irresponsabilidad" sugerir que "ningún contrato que se vaya a realizar en San Fernando Cádiz vaya vinculado a ningún otro contrato de ninguna categoría". 

El viernes pasado, los trabajadores de Navantia iniciaron una protesta, que amenazan con convertir en huelga, al considerar que sus puestos de trabajo podrían estar en riesgo como represalia de la monarquía pérsica ante la paralización de ese otro contrato, esta vez de venta a Arabia Saudí, cuyo montante es mínimo en comparación: de 9,2 millones de euros frente a los 1.813 de las corbetas.

Tras el Consejo de Ministros, la ministra portavoz, Isabel Celaá, y el equipo de Pedro Sánchez aseguraron que revisarían la paralización de la venta de bombas en una comisión interministerial. La impresión de que el Gobierno podría rectificar se extendió rápidamente. 

4.000 mullones en contratos

Este lunes, Robles ha asegurado que el Gobierno ha reactivado, en tan solo 100 días, contratos para la industria armamentística española por más de 4.000 millones, algo que debería servir como prueba del compromiso del Ejecutivo con el sector. Robles ha advertido de que el compromiso es idéntico con los trabajadores de San Fernando.

La titular de Defensa ha negado cualquier "vinculación" entre la paralización de la venta de armas y el supuesto riesgo para los contratos que se ejecutan en Cádiz. "Arabia Saudí es un país serio en sus relaciones comerciales", ha recordado. 

Robles tampoco ha anunciado una rectificación del Gobierno. Muchos pensaban que Sánchez cedería a la presión, pero ese contrato, como muchos otros, está en estudio desde que el PSOE llegó al poder, algo que Robles considera normal tras cualquier cambio de Gobierno. 

La venta de armas sigue paralizada

"Si entendemos que hay cuestiones que tienen que ser objeto de análisis", según Robles, "se hablarán, se resolverán en el marco bilateral en el que corresponde". "Las discrepancias que pueda haber en el contenido de ese contrato se estudiarán con el país con el que se han firmado, con Arabia saudí". 

La ministra ha advertido de que el Gobierno "va a trabajar siempre en el ámbito de los principios y valores de la ONU", que prohibe la venta de armas a países si se tienen indicios de que van a ser utilizadas contra la población civil. En el bombardeo de Arabia Saudí a Yemen de este verano murieron 51 personas, entre ellos 40 niños.

Noticias relacionadas