La Plataforma de Colectivos Trans de España carga contra Podemos y al menos 17 activistas han iniciado este miércoles una huelga de hambre con un acto simbólico reivindicativo a las puertas del Congreso de los Diputados. A pesar de que el Grupo de Unidos Podemos registró una Proposición de Ley en la Cámara Baja el pasado 23 de febrero, los de Pablo Iglesias todavía no la han sometido a trámite, con lo que el texto se ha quedado bloqueado.

"Unidos Podemos tiene secuestrados nuestros derechos en un cajón", ha bramado Mar Cambrollé, presidenta de la Plataforma. "Tenemos los apoyos para que la ley salga adelante, pero ellos practican la demagogia y después de ser las más maltratadas de la dictadura, no podemos ser ahora las más olvidadas de la democracia".

Ya en 2007 hubo otra huelga de hambre que dobló la voluntad de un Gobierno. Carla Antonelli -hoy diputada del PSOE en la Asamblea de Madrid- y otras representantes del colectivo, lograron que el Gobierno socialista entonces de José Luis Rodríguez Zapatero desbloqueara la llamada ley del cambio de nombre.

"Ningún Gobierno aguanta una situación tan extrema como una huelga de hambre, y en menos de 24 horas lo conseguimos", asegura Cambrollé, que ahora no comprende por qué una formación que se envuelve en la bandera de los derechos de los colectivos LGTB como Podemos les somete "a esta tortura". Según asegura, por parte del partido morado "ha habido torpeza política pero esto no puede convertirse en violencia política contra las personas trans".

Fuentes consultadas por este periódico en Podemos afirman que "respetan la huelga", pero alegan en su defensa que "ese texto se registró porque vimos que la ley LGTBI que se tramitaba en el Parlamento no contemplaba suficientemente las reivindicaciones del colectivo trans". Es más, aseguran que es responsabilidad del Gobierno darle impulso a través de un Proyecto de Ley y que ellos, por su parte, siguen "trabajando y buscando consensos entre los grupos". 

El texto registrado en las Cortes pretende normalizar la situación del colectivo transexual. En estos momentos, todas las autonomías salvo cuatro (Madrid, Aragón, Andalucía y la Comunidad Valenciana) "tratan a los transexuales como enfermos mentales", explica Cambrollé, "obligando a pasar exámenes psicológicos para iniciar los trámites de adecuación legal al género que sentimos".

Además, la ley contempla medidas en el ámbito laboral, para evitar la exclusión de este colectivo, con más de un 80% de sus integrantes en situación de "marginación profesional"; y otras en el sector de la enseñanza, como una revisión de los currículos académicos para que, con formación a los profesores, "se deje de dar por hecho que sólo existe el hombre y la mujer desde el nacimiento", explica la activista, "porque eso estigmatiza a los menores a los que se les ha asignado un sexo al nacer, simplemente mirando en su entrepierna".

La Federación de Plataformas Trans aglutina al 95% de los colectivos de este movimiento en España y entre quienes han iniciado la huelga de hambre hay incluso dos personas que no lo sufren en sus carnes, "dos madres que si tienen que morir lo harán porque nadie vuelva a vivir el infierno que están sufriendo sus pequeños".

A la cita ante la Puerta de los Leones del Congreso ha acudido una sola representante política, Elisenda Pérez, de ERC. "Estamos aquí para dejar claro que estamos con ellas, que estamos esperando que la ley se someta a trámite para apoyarla ,porque es una ley de bases imprescindible para que en las Comunidades Autónomas podamos desarrollar nuestra legislación propia", apunta en declaraciones a EL ESPAÑOL.

El pasado 3 de julio, el PSOE ya se comprometió públicamente a apoyar las reivindicaciones del colectivo trans, a la espera de que la ley se someta a debate. Pero eso depende de la voluntad política de Unidos Podemos, que por ahora se limita a alegar que hace "trabajo parlamentario en busca del consenso".

Pero eso "ofende a la inteligencia de un adolescente", alega Cambrollé. "Éste es el momento político para que salga esta ley, nadie la va a echar abajo", asegura. "Nos apoya ERC, Ciudadanos, el PSOE... hasta el PP podría abstenerse incluso, porque el texto no nos da privilegios, sólo igualdad".

La activista trans ha posado ante las escalinatas del Congreso, para finalizar, con un mensaje muy claro: "Si Podemos sigue bloqueando esta ley, será como recordar de nuevo los peores tiempos de la dictadura" porque, en su opinión, "la democracia no ha llegado a nosotras, las agresiones a nuestro colectivo siguen creciendo" y entretanto "Podemos parece esperar a que le convenga sacarnos del cajón..."