"Hasta yo me he quedado alucinado al leer todo lo que escribí", afirma Manuel Murillo, el hombre que amenazó con matar a Pedro Sánchez, en su declaración a la Policía. El tirador afirma que escribió los mensajes "fruto del alcohol" y para impresionar "la chica a la que se los envié".
Murillo asegura que lo hizo "para quedar de patriota" delante de ella. "Yo no soy simpatizante de Vox ni afiliado", asevera, "soy un catalán orgulloso de serlo y también español".
"No tengo ninguna intención de matar a nadie, por Dios. Era una forma de hablar", explica, afirmando en la declaración de la que ha informado Espejo Público, que no quería disparar tiros en el Valle de los Caídos si sacaban los restos de Franco de allí.
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"Sí, yo mandé todos esos Whatsapp. Hasta yo me he quedado alucinado al leer todo lo que escribí. Es la primera vez que mando mensajes de este tipo, es decir expresando mi voluntad de matar a Pedro Sánchez. Ese día estaba inspirado, pero ahora al revisar los mensajes veo que están mal, me he quedado parado.
El día en que le propuse el asesinato a la representante de Vox, había bebido. Sé que no es excusa, pero había bebido. Tomé una botella entera de vino y después un tubo. Recuerdo que lo hice estando en un Hostal al que suelo acudir. Casi siempre que voy me bebo una botella. Creo que bebí también algunas cervezas por la mañana. Ese día sé que me afectó más de lo habitual. Recuerdo que estaba sentado y empecé a mandar los mensajes pero sin pensarlo.
Yo nunca había pensado en matar a Pedro Sánchez ni a nadie. Se me iba ocurriendo según lo escribía, probablemente fruto del alcohol. Los leo y me doy cuenta que son tonterías, porque no tengo dinero para alquilarme un piso como para desarrollar un plan criminal. Vivo en un loft con mi madre enferma.
Sólo bebo comiendo. Hace un año pasé una época mala porque no encontraba trabajo, pero por fin me coloqué en una empresa de seguridad. Hago 240 horas al mes en turnos y eso me ha dado cierta estabilidad. Trabajo de 19.00 a 7.00 de la mañana en Barcelona en el edificio de una conocida compañía de automoción.
Cuando me detuvieron iba acompañado de una amiga. En el maletero del coche llevaba una carabina y una pistola de aire comprimido que iba dentro de su caja.
En casa tengo un armero de grado tres pequeño, pero como no tenía lugar para ponerlo, lo tengo desmontado.
Reconozco que tengo un CETME. En principio estaba inutilizado, pero soy inventor y bastante manitas y un día me propuse arreglarlo para que funcionara como un reto personal y lo hice. Fue hace unos 6 o 7 años. No pensé nunca que tuviera ninguna importancia.
Las ballestas y las flechas que encontraron, también las hice yo. Y también las fabriqué para practicar puntería dentro de casa. Nunca salieron a la calle. La única arma con la que podría disparar a distancia es la 308.
Respecto a la munición que encontraron en mi casa, a mí me parece que era normal, ni mucha ni poca. Tienen que tener en cuenta el número de armas que yo tenía, y que durante el mes de agosto el club de tiro estuvo cerrado y por eso pude acumular algunas más. Yo me fabrico mi propia munición y tengo el título de recarga.
Quiero dejar bien claro que yo no he tenido la voluntad real, ni en sueños, de atentar contra Pedro Sánchez. Ni siquiera mato animales. Hasta yo no puedo creerme lo que escribí. Sinceramente si lo hice para quedar de patriota delante de la chica a la que se los envié.
Yo no soy simpatizante de Vox ni afiliado. Soy un catalán orgulloso de serlo y también español. Me preocupa la situación actual del país, pero esto se ha sacado de quicio. Así que no volveré a hablar de política y venderé todas las armas.
Mi padre fue alcalde de Rubí en época de Franco e incluso conservo una foto en la que Franco le puso una medalla a mi padre. Yo siento como si mi padre estuviera un poco dentro de mi. De hecho creo que quizá se vivía mejor antes que ahora.
Respecto al mensaje que escribí sobre la exhumación de Franco en el que dije que si lo sacaban del Valle de los Caídos iría allí y me pondría a disparar, es falso. No tengo ninguna intención de matar a nadie, por Dios. Era una forma de hablar. Nunca le he disparado a nadie. Me pasó lo mismo el 12 de septiembre cuando dije que si sacaban a Franco me cargaba Pedro Sánchez. Era algo que dije en un grupo de amigos. No tenía ninguna importancia, como otras cosas que se dicen, y jamás pensé que saldría de ahí.
Es verdad que afirmé que no me importaría participar en un alzamiento en compañía de legionarios, por ejemplo, pero no, otra vez era hablar por hablar, no tenía intención de hacerlo. No tengo edad para participar en un alzamiento, por Dios. Era una fantasía estúpida provocada por la ingesta de alcohol."