El presidente de la Generalitat, Quim Torra, se ha mostrado convencido de que "en el camino de la recuperación de la soberanía" Cataluña y Euskadi "pueden sumar esfuerzos" y "vencer juntos al autoritarismo y la imposición" del Estado español.
Por ello, ha llamado a vascos y catalanes a poner en marcha un "frente democrático de defensa de todas las libertades, incluyendo el derecho a decidir y a la autodeterminación ante esta regresión que nos afecta a todos".
"Juntos somos más fuertes, más libres", ha resaltado Torra, quien ha considerado que "hay una plasmación posible en las elecciones europeas". "Podemos llevar la voz libre de los pueblos a la Europa de los estados?".
Torra ha realizado estas afirmaciones en la conferencia que, bajo el título Cataluña: soberanía, democracia, libertad, ha ofrecido en el Kursaal de San Sebastián, organizada por la iniciativa ciudadana Gure Esku Dago. Momentos antes de la misma, el mandatario catalán ha mantenido un encuentro con el coordinador general de EH Bildu, Arnaldo Otegi.
En el acto, al que han asistido más de un millar de personas, ha contado con la presencia del diputado general de Guipúzcoa, Markel Olano, la presidenta de las Juntas Generales de Guipúzcoa, Eider Mendoza, el presidente del GBB del PNV, Joseba Egibar, diputados forales y junteros jeltzales, los representantes de EH Bildu Arnaldo Otegi y Maddalen Iriarte, el secretario general de Sortu, Arkaitz Rodríguez, o la secretaria general de LAB, Garbiñe Aranburu, entre otros.
En su intervención, Torra ha pedido que el soberanismo "sepa establecer una coordinación estable con objetivos compartidos". En su opinión, "esta es la transversalidad, la generosidad, es la fórmula que ha llevado a Cataluña más lejos que nunca, a las puertas ya de una República independiente".
De este modo, ha asegurado que "el derecho a decidir, a la autodeterminación, no es negociable, ya que se trata de vuestro derecho y no pertenece a ningún dirigente político ni depende de ningún momento puntual" y ha llamado la ciudadanía vasca a tomar parte en las consultas de Gure Esku Dago porque "las urnas son el arma de construcción masiva que tenemos los pueblos" y le ha animado a "no dejarse robar el sueño, a no rebajar la aspiración de libertad".
Tras criticar la "progresiva involución en España", a la que se "le ha caído la careta tras una falsa transición" y denunciar el "renacimiento del autoritarismo y de un franquismo latente que se ha desacomplejado cuando hemos querido escribir la democracia con mayúsculas", ha defendido la importancia de "alertar al mundo de la aberración humana y política y de la nula calidad democrática del sistema español".
Asimismo, ha querido hacer un homenaje a todos los políticos y representantes independentistas en la cárcel o exiliados, para los que ha pedido un aplauso que ha puesto en pie al auditorio, en el que se han coreado gritos de "libertad", al tiempo que ha mostrado su solidaridad con todos los condenados por el caso Bateragune, -de los cuales Arnaldo Otegi y Arkaitz Rodríguez estaban presentes en la sala-, tras la resolución de Estrasburgo que avala que no tuvieron un juicio justo.
Torra ha incidido en que "alguno podría considerar que eso que llaman 'el desafío catalán' es lo que ha llevado a España a la crisis en que se encuentra", pero, según ha dicho, "no es cierto", ya que "el proceso político hacia la independencia ha sido una respuesta en clave democrática a una crisis que dejaba al descubierto 'los pies de barro' de la democracia española".
"Error" con el estatuto de 2006
A su juicio, "la represión, la negativa constante, la respuesta autoritaria y la regresión política de España, han convertido hoy la independencia en sinónimo de democracia y de derechos". El president catalán ha considerado que el Estado "cometió un gran error con la sentencia contra el estatuto de 2006, y ahora podría cometer otro con la sentencia del Tribunal Supremo contra el Govern, la mesa del Parlament y los líderes sociales".
En ese sentido, ha insistido en que "ante un proceso independentista radicalmente democrático y pacífico, la violencia de Estado, desde el Primero de Octubre hasta la desmesura con que han sido perseguidos los políticos catalanes que cumplían con el mandato de nuestro pueblo, ha enterrado los derechos civiles y las libertades fundamentales".
De este modo, ha asegurado que el Estado español "ya ha perdido a Cataluña. Pero Cataluña todavía tiene que ganar su libertad", al tiempo que ha subrayado que "no estamos aquí para rehacer la autonomía, ni para remendarla, ni tampoco hemos venido aquí a gestionar los restos del Estado de las autonomías, un Estado y una monarquía que los catalanes ya no consideramos propios, ni a un sistema de poder y de elites que no hicieron limpieza del franquismo en todas sus instituciones".
El mandatario catalán se ha mostrado convencido de que no tienen "más alternativa que avanzar hacia la libertad" y ha remarcado que quieren "levantar una República independiente porque será la única garantía de una relación sensata, de tú a tú, sin dependencias ni sometimientos, con el Estado español y, sobre todo, con el pueblo español".
Quim Torra ha advertido al Gobierno central de que "nada se puede construir desde la mentira y la violencia" y ha denunciado que ha habido "un intento planificado de destruir el ideal independentista", a pesar del cual "el pueblo de Cataluña ha resistido y ante la opinión pública internacional nuestra causa es más sólida y respetada que nunca".
"Queremos la panadería para nosotros"
Asimismo, ha considerado que la "represión" quiere que "nos olvidemos de la independencia y nos concentremos en recuperar la autonomía, que nos olvidemos del pan y nos concentremos en las migas", pero ha afirmado que han decidido que "ni migas ni pan: queremos la panadería entera para nosotros y éste es el objetivo de nuestra acción de gobierno".
Tras remarcar la importancia de la "movilización cívica permanente en las calles", ha apuntado la necesidad del trabajo del "Govern interior y Consejo por la República", al que ha sumado "la voz de las cárceles". Por ello, según ha explicado, "no vamos a los juicios a defendernos de nada, vamos a ir a los juicios a acusar al Estado español, nuestros compañeros son inocentes y nuestra causa es justa".
"Se juzga a 18 personas, pero a través de ellas se quiere juzgar y escarmentar todo un pueblo, y no vamos a consentirlo", ha asegurado, al tiempo que ha denunciado que "la venganza" rige las peticiones de prisión, así como la actuación del Gobierno central que "quiere ganar en los tribunales lo que han perdido en las urnas". "Esta es su obsesión y no se lo permitiremos", ha añadido.
Por todo ello, ha reiterado que han retirado cualquier tipo de apoyo al Ejecutivo español y no aprobarán el presupuesto de Pedro Sánchez. "Hemos llegado al mes de noviembre y el presidente español no ha puesto encima de la mesa ninguna solución democrática al conflicto político ni ha tomado ninguna decisión contra la represión política contra el independentismo", ha recordado.
"Que sepa todo el mundo que nosotros no traficamos con la democracia ni con la dignidad. No lo hacemos nosotros y no lo hará el pueblo de Cataluña, y otra cosa que no pensamos hacer es aceptar unas sentencias que no sean la libre absolución en esta gran causa contra el independentismo. No es ya una cuestión de política, ni siquiera de independencia. Se trata de ser fieles a nuestra conciencia de mujeres y hombres libres", ha concluido.