La Ley 19/2003 de 4 de julio del Taxi de la Generalitat de Cataluña establece que los conductores deben entender el catalán porque los usuarios "tienen el derecho de expresarse" en esta lengua con ellos.
En su artículo 26, titulado 'Fomento del uso de la lengua catalana', la citada norma establece que: "1. Las administraciones competentes en la materia deben fomentar el uso de la lengua catalana en las comunicaciones con los profesionales del taxi y en las comunicaciones entre sí y con los usuarios. 2. Los usuarios del servicio de taxi tienen el derecho de expresarse en lengua catalana en las comunicaciones con los conductores, en los términos que establece la normativa aplicable en materia lingüística".
La Plataforma per la Llengua recuerda a los taxistas esta "obligación" en un comunicado: "Los últimos días, se ha hecho viral el vídeo de la asamblea de taxistas en la Plaza de Cataluña de Barcelona en el que se veía como un sector de los huelguistas gritaba e insultaba un compañero catalanoparlante que expresaba sus opiniones en su lengua materna. (...) Recordamos al sector del taxi que tienen la obligación legal de poder atender a los clientes que se expresen en catalán. Actitudes como las mostradas en el vídeo de la asamblea de taxistas son discriminatorias y denotan que existe un supremacismo lingüístico estructural".
El Reglamento Metropolitano del Taxi, en su artículo 54, prevé además como infracción sancionable con una multa de hasta 250 euros "no aceptar que el usuario haga uso indistintamente de las lenguas catalana o castellana en las indicaciones para la necesaria prestación del servicio".
Esta reivindicación se produce en el marco de la huelga del taxi en su intención de sacar del mapa a los vehículos con licencia VTC en toda España.