Nadie se lo creía cuando le llegaba la imagen de una supuesta captura de Twitter con un mensaje junto a la foto y el nombre de perfil de Pablo Iglesias deseando una bomba en Colón durante la manifestación por la unidad de España. Pero el mero hecho de que alguien tuviera la idea y gastara tiempo en generar el falso tuit ya indica hasta qué punto ha llegado la división de las dos Españas: hasta los memes.
Este tipo de montajes que se comparten y viralizan en redes suelen mezclar el humor con la mordacidad o el sarcasmo. Pero rara vez traspasan la línea entre el humor negro y la atribución de un delito a un personaje público. En esta ocasión, con el protagonismo de la concentración de Colón contra Pedro Sánchez y por unas elecciones ya, se ha dado el caso.
"Ojalá una bomba ahora en Colón. ¿Dónde están los Terroristas cuando se les necista? #Yonovoy", dice el falso mensaje de Twitter.
Más allá de la intención de su creador -o bien demostrar la radicalidad de las izquierdas o bien dejar claro que los de derechas desearían poder acusar a Iglesias de desear semejante barbaridad-, el hecho es que la crispación de la vida política ha alcanzado unas cotas altísimas.
Si el manifiesto leído en la concentración acusaba a Sánchez de "traición" a España y de "puñaladas por la espalda" a la democracia, si mientras el presidente acusaba de "radicales" a los asistentes y Miquel Iceta decía que no dialogar es de "cobardes", ahora el pretendido humor de los memes ha caído en la misma tentación.