Vox ha comenzado este jueves la campaña de las elecciones municipales, autonómicas y europeas en un polígono industrial situada en el municipio madrileño de Paracuellos del Jarama, ligado a las matanzas de miembros del bando nacional durante la Guerra Civil.
Su jefe de campaña, Iván Espinosa de los Monteros, no ha querido, sin embargo, hacer referencia a la significación histórica de esta localidad y se ha limitado a explicar a los periodistas que se ha elegido un polígono industrial ubicado en el entorno de Barajas como símbolo de la "España que madruga".
En concreto, el acto de apertura, en el que intervino el líder de Vox, Santiago Abascal, tuvo lugar en una nave de restauración de muebles situada en la avenida General, del término municipal de Paracuellos, y cuya localización se ha mantenido en secreto hasta el último momento.
Abascal ha centrado su intervención en reivindicar como un gran triunfo los 24 escaños logrados en el Congreso de los Diputados y ha arremetido contra los partidos y medios de comunicación que han tratado de "distorsionar" hasta la "extenuación" un resultado con el que se ha conseguido la "normalización de la vida política española".
Una "normalización", ha dicho, que ahora debe llegar a las autonomías, los municipios y la Unión Europea con el apoyo de quienes ya les respaldaron el pasado 28 de abril y de otros muchos.
"Nos vemos en la obligación de volver a conquistar sus voluntades y volver a ofrecerles esperanza", ha subrayado el líder de Vox, convencido de que podrán trasladar su voz al resto instituciones, para lo que harán una campaña dirigida a la "España que madruga".
Ha incidido en que uno de cada diez españoles les votó, pero que aspiran a convencer a muchos más ante la "ceremonia de la confusión" que, en su opinión, vive la política nacional con la "romería" de líderes políticos a La Moncloa a la llamada de Pedro Sánchez, en un intento de "usurpar" las funciones del Rey.
Especialmente, ha criticado al presidente del PP, Pablo Casado, por sumarse a los "insultos de la izquierda" contra Vox y sus votantes y convertirse en un "peregrino sin rumbo" yendo a rendir "pleitesía" a Núñez Feijóo, que es quien ahora marca su política de cordón sanitario contra su partido, ha señalado.
Junto a Abascal, han estado el cabeza de lista al Parlamento Europeo, Jorge Buxadé, y los números uno a las Comunidad de Madrid, Rocío Monasterio, y al Ayuntamiento de la capital, Javier Ortega Smith.
Buxadé ha apuntado su intención de recuperar el espíritu inicial de la comunidad europea basado en respetar la autonomía de los estados y adoptar las decisiones por consenso.
Se ha comprometido a luchar en la contra el "federalismo" en la UE, que ha definido como "una simple organización internacional" a la que los Estados miembro han cedido su soberanía.
Monasterio ha apostado por hacer de la Comunidad de Madrid segura y libre de las mafias y ha expresado su deseo de que no se olvide el mundo rural, mientras que Ortega Smith se ha comprometido a convertir la capital en un "espejo" donde puedan mirarse el resto de municipios de España.