El alcalde en funciones de A Coruña, Xulio Ferreiro, ha anunciado que no tomará posesión de su acta de concejal cuando se constituya la nueva corporación municipal y que abandona la primera línea política tras haber perdido el bastón de mando en las elecciones del pasado domingo, aunque ha puntualizado que se queda en Marea Atlántica como un militante más.
"No hay nadie imprescindible en política", ha dicho en su comparecencia pública el aún regidor de A Coruña, quien ha proclamado que la Marea Atlántica tiene "mucha gente buena y generosa" y queda un grupo municipal "magnífico". "No me marcho muy lejos, abandono la vida institucional, la primera línea de la política, pero me quedo en Marea Atlántica como uno más, ofreciendo mi experiencia y mi trabajo como militante", afirmó.
Acompañado por los concejales de Marea Atlántica y otros miembros de su equipo, así como funcionarios municipales, ha explicado que esta decisión tiene "razones de carácter personal y político". "Cuando no se cumplen los objetivos que uno se pone, debe actuar en consecuencia y asumir responsabilidades". "El objetivo era revalidar la alcaldía y una mayoría de progreso y no se cumplió", ha reconocido.
Por ello, Ferreiro, visiblemente emocionado y con la voz entrecortada por momentos, ha dicho que "lo consecuente es dejar paso a otra persona o personas que puedan situar a la Marea Atlántica en condiciones de disputar la alcaldía en cuatro años".
En las elecciones del 26 de mayo, la Marea Atlántica liderada por Xulio Ferreiro retrocedió, con seis concejales, a la tercera posición, al perder cuatro actas, mientras que el PP fue la lista más votada, pero empatado con el PSOE a nueve ediles. Por su parte, el BNG obtuvo dos plazas y Ciudadanos una, con lo que la socialista Inés Rey se perfila como próxima alcaldesa.