La reunión de este martes entre Pablo Iglesias y Pedro Sánchez de cara al debate de investidura que comenzará el 22 de julio ha concluido en fracaso. Tanto que ese primer intento parece condenado a morder el polvo y desde el PSOE se advierte con que podría no haber segunda oportunidad. La retórica roja y morada alcanza ya niveles de gran dureza por la desconfianza mutua y el reparto de culpas ha comenzado, casi como si fuera una precampaña electoral. Las elecciones el 10 de noviembre parecen hoy más cerca.
"A Pablo Iglesias le importan más los nombres del Consejo de Ministros que las políticas", ha dicho Lastra. Iglesias "no se quiere sentar" a hablar de políticas concretas, ha lamentado.
Era la quinta reunión entre Sánchez e Iglesias desde las elecciones generales del 28 de abril, pero todo sigue bloqueado por la exigencia de Unidas Podemos de contar con ministros en un Gobierno de coalición y el rechazo del PSOE a la pretensión, aceptando sólo un "Gobierno monocolor" para el que los morados puedan como mucho proponer nombres de independientes.
Lastra ha asegurado que Iglesias ha dicho "no" a negociar el documento presentado por el PSOE este lunes, una "síntesis" del programa electoral, según Cristina Narbona, y ha asegurado que "no es la primera" oferta en materia de políticas concretas que la formación morada se niega a discutir. Según la también portavoz parlamentaria, Iglesias tampoco ha respondido a la propuesta de crear una comisión de seguimiento de los acuerdos y tampoco ha aportado nombres de ministros independientes para el Ejecutivo.
Falta de voluntad
"Si hubiera voluntad, podríamos entendernos", ha dicho Lastra, que ha lamentado también que Iglesias no quiera crear mesas de negociación que incluyan a dirigentes de ambos partidos para avanzar en los contenidos programáticos. "Antepone los nombres para formar el Gobierno a los contenidos, las políticas a desarrollar", según ella. "A lo mejor es que no tiene tanto ánimo de pacto", ha concluido.
Lastra también ha dicho que Sánchez se presentará a la investidura el 22 de julio pero que si fracasa no pretende intentarlo de nuevo antes del 23 de septiembre, cuando se disolverán las Cortes y se convocarán unas nuevas elecciones. "La ministra de Hacienda ha dicho que no hay segundas oportunidades y yo lo ratifico", en palabras de Lastra.
En otras palabras: el PSOE ofrece a Iglesias un ultimátum. O toma el "Gobierno de cooperación" monocolor o será el responsable de unas nuevas elecciones. La portavoz parlamentaria cree que no cambiará nada en dos meses y que, por ese motivo, España se encaminará a elecciones. Lastra ha abandonado la sala de prensa a toda velocidad y tras admitir sólo cuatro preguntas pese a las decenas de peticiones.
Podemos acusa a Sánchez de querer elecciones
La visión de Podemos es muy distinta.
"Nuestro planteamiento es claro. Lo que necesita España es un Gobierno de coalición de izquierdas. Esperamos convencer al PSOE de que flexibilice su posición", ha dicho por su parte Iglesias al abandonar el Congreso.
"Creo que más tarde o más temprano convenceremos al PSOE de que se mueva", ha añadido. "El planteamiento de ayer de un Gobierno de partido único va en una dirección contraria a lo que ha votado la ciudadanía", ha dicho en referencia a las palabras de Cristina Narbona.
"Pedro Sánchez nos ha trasladado que llevará al país a elecciones si no cuenta con apoyos en la investidura de julio", han explicado además fuentes moradas.
"Constatamos que no quiere negociar sino que intenta imponer unilateralmente un Gobierno de partido único", explican desde la formación, donde están muy decepcionadis con que el candidato socialista quiera negociar a izquierda y a derecha.
"No es sensato que el PSOE actúe como si tuviera mayoría absoluta", aseguran las mismas fuentes. "No es serio ir a una investidura sin haber logrado apoyos y amenazar con una repetición electoral". "Hemos pedido a Sánchez que flexibilice su posición y negocie desde ya un acuerdo integral de coalición de izquierdas sin líneas rojas", añaden.