El alcalde de la isla italiana de Lampedusa, Salvatore Martello, explicó este sábado a que "en Italia nadie sabe qué hacer con el Audaz", que se encuentra desde el viernes en aguas italianas a la espera de contar con la autorización necesaria para llegar a puerto.
El barco está fondeado frente a la bocana del puerto de Lampedusa, que es pequeño y con tráfico de ferris, y fue enviado por el Gobierno de Pedro Sánchez para hacerse cargo de 15 de los migrantes rescatados por el Open Arms que llevará a España.
"Aquí nadie sabe nada. He hablado con la Capitanía del Puerto en Lampedusa y no saben nada", expresó Martello, en declaraciones a Efe, al tiempo que se preguntó sobre si el Ejecutivo español envió la nave "por iniciativa propia o después de hablar con alguien" en el país.
El Audaz necesita una autorización para poder atracar en el puerto o que los migrantes a los que ha venido a recoger lleguen al buque de otra manera, por ejemplo en barcas pequeñas o en helicópteros, pero Italia está sumida en una crisis política, con un Gobierno en funciones, "y nadie quiere tomar decisiones", opinó Martello.
Las oficinas de prensa de los ministerios italianos de Interior, Exteriores, Defensa y Justicia han señalado a Efe que la situación del barco no es de su competencia y no han sabido indicar de quién lo es, mientras que del de Transportes han manifestado que "el buque es muy grande y no puede entrar en puerto", por lo que ahora tendrán que ser los titulares de Interior o Defensa quienes decidan qué hacer.
Ante esta situación, Martello ha decidido escribir un mensaje en las redes sociales "a ver si se empieza hablar de la situación y, si nadie toma una decisión, que intervenga el presidente de la República", Sergio Mattarella, dijo durante la conversación telefónica.
Centro de acogida "sobrecargado"
En este mensaje, el alcalde de Lampedusa critica que "lo que está sucediendo es paradójico", porque primero el Gobierno italiano mantuvo "a los migrantes a bordo del Open Arms durante casi veinte días" sin autorizarles un puerto, y ahora "esos migrantes están todos en la isla, con el centro de acogida sobrecargado", pues tiene 92 camas y actualmente hay en su interior unas 200 personas.
"Mientras tanto, ha llegado un barco de la Armada española que está parado frente a nuestro puerto: están listos para transferir una parte de los migrantes a España, pero aquellos que primero querían evitar que desembarcaran ahora no autorizan su transferencia", subrayó.
"Queda por ver si esta situación se basa solo en un defecto de comunicación o en un deseo específico de crear tensión en nuestra isla", añadió.
Y es que, según Martello, debería ser el Ministerio del Interior italiano, dirigido por el ultraderechista Matteo Salvini, quien tomara una decisión, ya que de él dependen "las personas que entran y salen de Italia".
Según fuentes del Estado Mayor de la Defensa, el Audaz está fondeado en las proximidades de la isla a la espera de que la justicia italiana y la UE digan "cuando y cómo proceder para la recogida de los inmigrantes".
Está previsto que el barco se haga cargo de 15 de los migrantes rescatados por el Open Arms para llevarlos a España, de acuerdo con el reparto fijado por la Comisión Europea, en el que también participan Alemania, Francia, Luxemburgo y Portugal.