El nieto mayor de Franco, Francis Franco ha acudido este jueves con una bandera preconstitucional a su llegada al Valle de los Caídos de donde se han exhumado los restos de Francisco Franco para posteriormente ser trasladados al cementerio de El Pardo-Mingorrubio para su reinhumación.
Se trata de la misma bandera que se puso sobre el féretro del dictador durante su entierro en 1975 y que el Gobierno no ha permitido colocar en esta ocasión mientras estén en el Valle de los Caídos.
Esta misma mañana el Ejecutivo ha informado de que "dentro de la basílica, la familia no puede colocar ni exhibir ninguna bandera. Si lo hiciese, la bandera o símbolos serían retirados en el lugar". Y ha añadido que "fuera de la basílica, no hay permiso para exhibir o colocar banderas o símbolos que exalten la dictadura. Si ocurriese, las autoridades podrían abrir el correspondiente expediente sancionador".
Los familiares de Francisco Franco, en su mayoría nietos y bisnietos, junto al resto de autoridades y su abogado, Luis Felipe Utrera-Molina, han accedido al interior de la basílica del Valle de los Caídos pasadas las 10:20 para asistir a la exhumación del dictador.
Junto a la familia, dentro de la basílica solo estaban los operarios estrictamente necesarios para extraer la losa que cubre la tumba, así como un forense, la ministra de Justicia, Dolores Delgado, como notaria mayor del Reino, y altos cargos del Ministerio de Presidencia.
Todos pasaron antes por un detector de metales para evitar la entrada de cualquier dispositivo de grabación y el perímetro de la tumba estará cubierto con una carpa a la que solo entrarán dos familiares -Cristóbal y Merry Martínez-Bordiú- y el personal indispensable.
Según el dispositivo diseñado por el Gobierno, las tareas de exhumación comenzaron formalmente a las 10:30 horas. La pesada losa se levantó mediante cuatro gatos hidráulicos y un rodillo que permitirá apartarla a un lado.