La dirección de Patrimonio Nacional ha autorizado los trabajos de exhumación de los enterrados en el Valle de los Caídos "a los familiares de las personas inhumadas cuyas solicitudes de exhumación se encuentran en trámite", según explica el organismo.
Concretamente, se van a iniciar obras "en las criptas adyacentes a las Capillas de la Basílica de la Santa Cruz del Valle de los Caídos", para permitir a los familiares de los enterrados que solicitaron sacar sus restos de estos lugares.
La decisión de Patrimonio se realiza tras el informe técnico del CSIC en el que se cree posible exhumar los restos mortales de las víctimas de la Guerra en el Valle de los Caídos siempre que se cumplan las medidas de seguridad oportunas.
Los trabajos se centrarán primero en "el acceso y afianzamiento de los distintos niveles de las criptas, se procederá a la apertura de la Capilla del Santo Sepulcro, siguiendo por la Capilla del Santísimo y finalmente, por las capillas laterales de la nave de la Basílica".
El informe se refiere, como explican en Patrimonio, sobre la exhumación de los hermanos Lapeña en la Capilla del Santo Sepulcro que ya ganaron la batalla jurídica y consiguieron la autorización del juez para sacar a sus familiares de la cripta.
Difícil identificación
Patrimonio recuerda que "durante todo el proceso se contará con la asistencia permanente de expertos forenses para el asesoramiento técnico y legal del tratamiento de los columbarios. A su vez y en el transcurso de la ejecución de las distintas fases de las obras, se solicitará al Consejo Médico Forense una inspección valorativa, que lleve a determinar las distintas consideraciones físicas, técnicas y jurídicas en cada lugar de la Basílica".
En el informe se establece la posibilidad de que muchos de los restos estén en tan mal estado que no puedan ser identificados ni siquiera con las pruebas de ADN. Patrimonio asegura que "de esta forma y teniendo en cuenta todas las medidas y actuaciones anteriores, se podrá determinar la viabilidad de la localización, identificación y la recuperación de los restos de las personas inhumadas, con respeto a los derechos de terceros".
La histórica decisión de Patrimonio Nacional, organismo dependiente del Gobierno central, pone punto final a la batalla legal de los familiares de los hermanos Lapeña, fusilados y enterrados en una fosa común de la localidad aragonesa de Catalayud.