Carmen Calvo cree que el PSOE no debe tropezar en debates estériles. En una semana marcada por el asedio de la oposición al ministro de Transportes, José Luis Ábalos, por Venezuela en el Congreso y tras las declaraciones de la ministra de Exteriores, Arancha González Laya, considerando a Juan Guaidó al mismo tiempo "presidente encargado" y "líder de la oposición", la número dos del Gobierno y cuatro del partido ha tocado a rebato.
Ha sido este viernes, en una reunión sobre Igualdad en la sede del PSOE, cuyo discurso inicial ha sido distribuido por el partido. Calvo ha pedido a los socialistas centrarse su acción política en "el lugar de lo humano y la humanidad", "donde ha estado residenciado" el ADN socialista, que es el "Estado del bienestar".
Calvo ha pedido defender los valores socialistas frente a los que quieren "arrastrar" al PSOE no a "lo que importa sino lo que les importa", en referencia a PP, Vox y Ciudadanos, a quienes consideró como derecha "radicalizada" y negacionista del "clima", la "violencia" de género y el feminismo.
La vicepresidenta primera del Gobierno y secretaria de Igualdad del PSOE ha pedido a su partido no desviarse de los temas importantes "cuando quienes quieren la política sólo sea un combate inútil de cosas que a nadie le importan. Pongamos Venezuela. Pongamos Venezuela", ha dicho, cosechando un murmullo entre los asistentes, todos cargos del PSOE.
"Nosotros haremos política aquí. Aquí con los problemas que duelen: la dependencia, la vejez, la soledad, la manera de nacer, la interrupción voluntaria del embarazo, que es la libertad de cada una de nosotras para hacer nuestra agenda, la protección de nuestros menores como un valor superior de la Constitución, muy por encima de los egoísmos de nadie, incluidos sus propios progenitores", ha dicho.
"Humanismo, socialismo y feminismo. Lo de siempre puesto al día", ha pedido. Entre otras cosas, Calvo ha llamado a su partido a llenar las plazas y las calles el 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, y todos los días del año.