El exconseller de Interior de la Generalitat Joaquim Forn, en prisión por el 1-O, ha salido a las 7.37 horas de este jueves del centro penitenciario de Lledoners, en Sant Joan de Vilatorrada (Barcelona) para ir a trabajar a Mediapro en el primer día en que se le aplica el artículo 100.2 del reglamento penitenciario.
Forn podrá salir de la cárcel doce horas y media al día, cinco días a la semana, de lunes a viernes, para trabajar en el departamento legal de la productora, donde se encargará de los asuntos de derecho público.
Dos familiares han recogido a Forn en un coche privado a las puertas de la prisión para trasladarlo hasta la ciudad de Barcelona, donde tiene su sede Mediapro.
Forn, condenado a 10 años y medio de prisión por sedición, sigue así la estela del líder de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, de la exconsellera Dolors Bassa y de la expresidenta del Parlament, Carme Forcadell, quienes se benefician ya de la aplicación del artículo 100.2, que flexibiliza el régimen penitenciario.
La cárcel de Lledoners también ha aplicado este artículo al exlíder de la ANC Jordi Sànchez, aunque de momento no lo ha activado.
El 100.2 lo proponen las juntas de tratamiento de las cárceles -integradas por juristas, psicólogos, educadores sociales, médicos y maestros- y los eventuales recursos se agotan en la Audiencia de Barcelona, a diferencia de la clasificación penitenciaria, en que la última palabra la tiene el tribunal sentenciador.