Está claro que, a tiempo o más tarde de lo debido, el Gobierno ha puesto en marcha una serie de medidas contundentes para luchar contra el nuevo coronavirus SARS Cov-2 y la enfermedad que provoca, COVID-19.
Este jueves el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunciaba un primer paquete de medidas extraordinarias en las que se incluyen muchas de las ya anunciadas -desde la recomendación de teletrabajar a la obligación de celebrar a puerta cerrada eventos deportivos-, pero iba más allá.
En la comparecencia donde ha anunciado dichas medidas, Sánchez ha apelado a la responsabilidad y la disciplina social de los españoles, que considera esencial para lograr "el propósito de todos": superar la emergencia sanitaria con el menor coste de vidas posible.
"Los españoles hemos de cuidar de nuestra salud para cuidar de los demás. Protegernos para proteger a los demás. Cada vez que uno se lava manos, evita desplazamientos, cada vez que ignora los bulos, cada vez que se hace un uso racional de productos médicos, estamos contribuyendo", ha declarado épicamente.
"Todos podemos hacer algo por los demás", ha añadido.
Sánchez ha recordado que se recomienda evitar "cualquier viaje imprescindible" y que todas las personas que tienen síntomas respiratorios y fiebre -pero que no estén graves- en Madrid, La Rioja y Vitoria y La Bastida deben "permanecer en su casa", como también deben hacerlo las personas inmunodeprimidas y los mayores.
También ha sugerido que se reduzcan las visitas a estos grupos poblacionales.
Respecto a la posibilidad de aplicar medidas adicionales -como el rumoreado cierre de Madrid o las restricciones de movilidad entre provincias obligatorias-, Sánchez ha dicho que hacerlo dependerá del consejo de los expertos, así que no ha descartado que se apliquen en próximos días.