Irene Montero ya se ha reincorporado a las reuniones del Consejo de Ministros pero ha dado plantón al Congreso. El pleno de la Cámara Baja tenía previsto debatir este miércoles la convalidación del decreto-ley que estableció medidas urgentes en materia de violencia de género pero la ministra de Igualdad, que promovió la iniciativa, ha forzado su retirada del orden del día.
La Junta de Portavoces del Congreso ha acordado en su reunión de la tarde del martes sacar del orden del día el debate sobre el decreto–ley 12/2020 de medidas urgentes en materia de protección y asistencia a las víctimas de violencia de género. Montero, que ha estado 42 días en su chalé de Galapagar tras dar positivo en el test del coronavirus (aunque aseguró encontrarse "muy bien" en cuanto a los síntomas), ha pedido posponer su asistencia al Parlamento, por lo que el decreto-ley sigue pendiente de convalidación.
La norma viene aplicándose desde el 1 de abril sin que las fuerzas políticas hayan podido discutir su contenido. El Congreso había previsto inicialmente el debate para su validación el día 9, pero la baja de la titular de Igualdad motivó su aplazamiento. Ahora, ya superado el coronavirus, tendrá que volver a postergarse aunque ya había sido incluido en el orden de la sesión.
El decreto-ley declaró esenciales los servicios de atención a las mujeres víctimas de violencia machista mientras siga vigente el estado de alarma. También recoge la posibilidad de habilitar alternativas habitacionales para potenciales victimas de violencia de género que pudieran verse obligadas al confinamiento junto a sus maltratadores.
Montero dio positivo al Covid-19 el pasado 11 de marzo, tres días después de participar en la manifestación del 8M en Madrid que celebró el Día de Mujer. Desde entonces ha permanecido con síntomas leves en su residencia de Galapagar apartada de la vida pública aunque sí ha concedido varias entrevistas en televisión.