El vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, ha calificado de irresponsable y electoralista la actitud de la Comunidad de Madrid ante su petición de pasar a la fase 1 del plan de desescalada y acusa a su presidenta, Isabel Díaz Ayuso, de "hacer propaganda" con la pandemia y pretender "ganar posiciones políticas jugando con algo tan serio como es salvar vidas".
"Todo el mundo sabe que hay que al menos dos territorios especialmente golpeados por el virus, que son Madrid y Barcelona", ha señalado Iglesias, que remarca que "no hace falta ser un gran experto" para llegar a la conclusión de que la desescalada en estos territorios "tienen que ir con ritmos más lentos" y que, por tanto, Madrid no pasará a la fase 1.
"Los números son evidentes y la gente está escandalizada", ha lamentado el vicepresidente, que ha recordado que Madrid y Barcelona, "por sus propias características poblaciones" han sufrido un impacto más severo en las UCIs.
En una entrevista en Radiocable, el vicepresidente segundo se ha mostrado muy crítico con Díaz Ayuso y ha opinado que "no se puede hacer propaganda con algo tan serio como salvar vidas". "Cuando llegue el momento, los ciudadanos sabrán juzgarlo", ha añadido unas horas después de que la directora de Salud Pública de Madrid, Yolanda Fuentes, dimitiese al no compartir la postura de la propia Comunidad de Madrid de facilitar la documentación para entrar en la fase 1. Fuentes prefería mantener de momento la situación actual de nivel cero.
Madrid presenta un informe solo con datos y sin firma
La Comunidad de Madrid remitió anoche a Sanidad toda la documentación para pasar a la fase 1. Lo hizo fuera de plazo, sin firma y solo se sustenta en una caída del 84% de hospitalizados y del 64% de los ingresados en UCI durante el pico de incidencia de la pandemia.
Dentro de ese informe, la Consejería de Sanidad de Madrid ha explicado el descenso de todos los indicadores provocados por esta epidemia en la región, y especialmente el descenso mantenido en el último mes desde el pico de la crisis -registrado entre los días 31 de marzo y 1 de abril- de las hospitalizaciones en los centros sanitarios madrileños y de los ingresos en UCI.