Pablo Casado censura el pacto de Pedro Sánchez con Bildu y pronostica que "no va a ser la última vez" que el Gobierno pacte con los herederos de Batasuna. "Seguramente fue una estrategia errónea, pero todo apunta a que el miércoles no fue un error de estrategia". En la primera rueda de prensa presencial desde Génova, el presidente del PP ha justificado su voto en contra al estado de prórroga poniendo en duda el plan de desescalada de Moncloa y con este "cambio de alianzas hacia la alianza radical: Sánchez ha cambiado los Pactos de la Moncloa por el Pacto de Estella".
El líder del PP recordó la historia de EH Bildu, que "justifica el asesinato de 800 inocentes", y considera "inadmisible" que el Gobierno culpe al PP de ese pacto. "Es de muy mal gusto decir que es culpa del PP. Este partido tiene demasiadas víctimas del terrorismo".
Además, en Génova se apartan de Sánchez alegando que el Gobierno ya "ha homologado a Bildu" como un partido con el que se "puede llegar a acuerdos de gobernabilidad: lo ha hecho en comunidades autónomas y ayuntamientos". Y, a juicio del presidente del PP, "es muy peligroso porque en ese momento se blanquea la historia criminal de la formación".
Casado miró hacia la militancia socialista, a la que "le causa estupor ver el logotipo del partido en un acuerdo formal al lado de Bildu y la firma de los máximos representantes parlamentarios". A juicio del líder de la oposición, Sánchez "ha intentado engañar a todo el mundo todo el tiempo" y "el engaño puede llegar al ridículo". Casado ha sido tajante con este pacto y ha subrayado que "el único partido que debe estar en cuarentena es Bildu".
Alianzas
Casado acusa a Sánchez de "lanzarse a los brazos" de Bildu "en la primera ocasión que ha podido". En la misma línea que se ha manifestado la Fundación Faes que preside José María Aznar durante la mañana de este lunes, el presidente del PP ha recordado otras alianzas previas que el PSOE tejió con Bildu. "Pactó con ellos no solo la Mesa del Parlamento foral, sino el Gobierno de Navarra y los presupuestos que mantienen a María Chivite al frente" de ese Ejecutivo.
El Partido Popular apoyó las tres primeras prórrogas del estado de alarma, se abstuvo en la cuarta y advirtió que la quinta votaría en contra, como finalmente hizo. Ahora, Casado pregunta a Sánchez qué informes de la Abogacía del Estado tiene en su poder que justifique esta estrategia de desescalada que aplica "a trompicones", de una manera "casi espasmódica".
Contradicciones
Casado puso el espejo de las contradicciones ante Sánchez. "El estado de alarma era imprescindible, pero dice que hemos salido más fuertes; hay que mantener el confinamiento pero se puede volver a los espectáculos deportivos; los turistas internacionales serán bien recibidos pero mantiene la cuarentena; impulsa una renta mínima pero sigue sin pagar un millón de ERTEs".
El plan B del Partido Popular para sustituir al Gobierno de Sánchez y Pablo Iglesias sigue sobre la mesa y tildó de "aberración jurídica" decir "que solo con el estado de alarma se puede limitar la circulación". "La excepcionalidad constitucional no puede durar eternamente", hay que salir cuanto antes", concluyó.