El Consejo de Ministros dio luz verde este martes al esperado fondo autonómico de 16.000 millones de euros para financiar el impacto económico del Covid-19. EL ESPAÑOL ha tenido acceso al reparto de esta partida, que se abonará a lo largo de 2020 y que será no reembolsable.
En concreto, según ha podido confirmar este medio, el Ejecutivo destinará a la Comunidad de Madrid algo más de 3.000 millones de euros, otros 3.000 a Cataluña, 2.100 a Andalucía y unos 1.400 a la Comunidad Valenciana.
Estas cuatros regiones son las que más fondos captan, al tiempo que también son las más pobladas del país. De hecho, Madrid y Cataluña ya aglutinan el 40% del total de la partida aprobada por el Gobierno.
Según la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, el fondo se repartirá en cuatro tramos temporales y no será exclusivamente para sanidad, aunque será el ámbito que mayor cantidad acapare: 9.000 millones. ¿Cómo se distribuirá esta cifra? Por indicadores sanitarios.
El reparto
De esta manera, se entregarán 6.000 millones en julio, según los datos sanitarios presentados por las regiones hasta el 30 de abril. Se computarán los ingresos UCI (30%), los pacientes hospitalizados (25%), las PCR totales realizadas (10%), así como la población protegida equivalente (35%).
Los 3.000 millones restantes se abonarán en noviembre y los criterios de reparto se basarán en los ingresos UCI (25%), los pacientes hospitalizados (20%), las pruebas PCR totales realizadas (10%) y la población protegida equivalente (45%) hasta el 31 de octubre.
A pesar de que estos millones llegan como ‘agua de mayo’ para las regiones, fuentes autonómicas consideran que el reparto, por los criterios empleados, es injusto y temen que se quede corto en aquellas regiones donde el impacto sanitario ha sido mayor.
De hecho, los criterios han cambiado en varias ocasiones desde que Pedro Sánchez anunció este fondo a primeros de mayo. En un principio, iba a ser en función de la población, como se fijó por consenso en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (SNS) con el reparto de los 300 millones para gasto sanitario que preveía el Real Decreto 7/2020, de 12 de marzo, pero después pesaron más los datos de incidencia del virus.
Se fijó entonces que el reparto se basara hasta en un 80%, según el número de afectados y, en menor medida, en criterios poblacionales. Pero un mes después Hacienda cambió de nuevo el criterio.
Además, se han añadido nuevas funciones al fondo autonómico más allá de la sanidad, como los 800 millones para transporte público y otros 2.000 millones para educación, que se han detraído de lo destinado a servicios sociales y sanidad. Es lo que ha perjudicado a las Comunidades más afectadas por la enfermedad. De ahí, las quejas y las confusiones de las regiones, incluso las gobernadas por el PSOE.
Queja de Andalucía
Aunque en un principio el Gobierno andaluz valoró el cambio de criterio del Ejecutivo central, al pesar más el criterio poblacional ve insuficientes los aproximadamente 2.100 millones que le corresponderán siendo la Comunidad más poblada de España, con 8,5 millones de habitantes.
"Con este reparto perdemos más de 800 millones de euros", ha asegurado el consejero de la Presidencia de la Junta de Andalucía, Elías Bendodo. Por ello, no descarta ninguna vía para reclamarlos al Gobierno central: "Nos corresponden".
Tras el Consejo de Gobierno celebrado en Sevilla este martes, Bendodo explicó que, históricamente, el socialismo andaluz siempre ha defendido que el reparto de fondos estatales se hiciera en función de la población. El consejero aludió a los expresidentes Manuel Chaves, José Antonio Griñán y Susana Díaz y a la propia ministra de Hacienda, María Jesús Montero, exconsejera andaluza.
Cataluña, 1.000 millones más
Con ese planteamiento, criticó que el Ejecutivo central no prime este criterio. "Alguien tiene que explicar que Cataluña reciba 1.000 millones más cuando tiene un millón de personas menos viviendo allí". A su juicio, no se puede potenciar los desequilibrios territoriales por "presiones políticas".
En este sentido, Bendodo explicó que Andalucía sale perdiendo porque se infrafinancia en un 34,5% en relación a lo que le corresponde. Por tanto, espera que el Gobierno rectifique de nuevo.
En cifras globales, el dirigente de la Junta detalló que a su región le deberían tocar unos 3.000 millones. Andalucía recibe un 13,5% del fondo cuando, a su juicio, "debería recibir cerca del 20%, mientras que entre Cataluña y Madrid suman casi el 40%".
Además, sostuvo que con este montante no se cubriría la factura del Covid. "Solo en sanidad hace unos días el gasto era de 1.800 euros y sigue sumando". Bendodo añadió que, dependiendo del plan que se apruebe para la vuelta a las aulas, se necesitarán más fondos.
"Tendríamos que contratar a 30.000 profesores más, lo que supondría un gasto de 1.000 millones". En esta línea, el presidente defendió la medida aprobada por el Gobierno para reactivar el sector del automóvil, pero no entiende "que se destine el doble que a educación".
Por otro lado, de los 2.000 millones planteados para educación, a Andalucía le corresponderían 350 millones. "Es claramente insuficiente". Esta partida se pagará en septiembre y se repartirá conforme a la población de 0 a 16 años (80%) y a la población de 17 a 24 años (20%) de las regiones.
Otras partidas
Del fondo autonómico, la segunda partida más elevada es la destinada a compensar la caída de ingresos tributarios de las regiones de régimen común (es decir, todas menos País Vasco y Navarra) por la crisis económica, dotada con 5.000 millones, de los que 800 se irán a consorcios de transporte público.
El problema, según indican desde las regiones, es que todo esto se puede quedar corto. Todavía se desconoce el alcance real de la crisis económica (órganos como el Banco de España o la AIReF están teniendo que cambiar constantemente sus previsiones) y todavía se desconoce cuál puede ser el impacto del Covid-19 en otoño. Cabe recordar que no se descartan nuevos brotes en unos meses.
Además, las regiones han activado numerosas medidas en políticas sociales o fiscales (como exoneraciones de impuestos) no previstas este año, que se tendrán que financiar de alguna manera.
Déficit
En este sentido, a las autonomías siempre les quedará recurrir al déficit. Sin embargo, las regiones temen el peso que puede tener en sus cuentas el incremento de los números rojos por encima de lo que pueden manejar y su impacto en el futuro. Cabe recordar que la AIReF ya ha alertado de que el déficit autonómico se podría llegar a cuadruplicar este año.
En cualquier caso, el Ministerio de Hacienda ha dado luz verde a más medidas extraordinarias para aliviar el equilibrio fiscal, al menos en determinadas Comunidades. Concretamente: País Vasco, Navarra y Canarias. Estas autonomías podrán echar mano del superávit presupuestario logrado en 2019 para compensar gasto este año.