El presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, ha defendido este sábado el 1-O y ha pedido seguir reivindicándolo: "Lo volveremos a hacer. Y no tengo ninguna duda: lo haremos por amor en la vida y a la libertad". Cuixart ha publicado un vídeo con un breve discurso dirigido a los socios de la entidad el día en que cumple 1.000 días de prisión por el 1-O, como el expresidente de la ANC Jordi Sànchez.
En su primera aparición desde que entró en la cárcel, el 16 de octubre de 2017, Cuixart ha dicho textualmente que seguirá defendiendo la lucha no violenta y la desobediencia civil para transformar la sociedad: "Estamos viendo qué pasa en todo el mundo".
"Ni la violencia institucional ni la prisión secuestrarán la movilización social ni la voluntad democrática del pueblo de Cataluña", ha añadido.
Lo ha justificado "por la dignidad de los 1.000 heridos del 1 de Octubre, por los más de 2.500 represaliados y porque esta es la voluntad del conjunto de la sociedad catalana". "Pase lo que pase, nuestro límite nunca más puede ser ni la prisión ni el exilio", matizó.
"Ni Franco pudo acabar con Òmnium"
"Seguimos ejerciendo derechos humanos condenados por el Estado español, acusando directamente la monarquía, símbolo de los poderes del Estado, y denunciando al mundo entero la injusticia, la corrupción, la impunidad" que Cuixart ve en España, donde asegura que hay quiebra democrática, social y económica.
También ha explicado que uno de sus aprendizajes de 1.000 días encarcelado es que "hay que trabajar por una cultura que tiene que ser valiente y transgresora", y también ha dicho que lleva 1.000 días de prisión por ser el presidente de Òmnium.
"Uno de mis objetivos ha sido mantener la serenidad y la determinación para salir de la prisión como presidente de la entidad. Por no ceder al chantaje del Estado", ha dicho.
Y ha advertido de que "el Estado español no decidirá nunca quién es el presidente de Òmnium Cultural, porque ni Franco pudo acabar con Òmnium".