Las Fuerzas Armadas, Francisco Reynés y Pablo Laso, Leones de El Español
Los premios serán entregados el 26 de octubre en una ceremonia restringida que se celebrará en el Casino de Madrid.
21 octubre, 2020 12:31Noticias relacionadas
Solidaridad en tiempos críticos, una perspectiva sostenible en el sentido más amplio y éxitos de la mano de deportividad y buen hacer. De la Operación Balmis a la formación de rastreadores para controlar los brotes de coronavirus; pasando por una gestión donde el compromiso medioambiental, la acción social y el buen gobierno corporativo cobran más importancia que nunca y terminando con una carrera plagada de triunfos deportivos en un tiempo récord. Colaboración, liderazgo y experiencia.
Razones que encarnan buena parte de los valores que EL ESPAÑOL defiende y que cobran aún más relevancia en tiempos de crisis y de pandemia, un periodo extraordinario que requiere acciones extraordinarias. Ejemplos de los merecimientos que unen a las Fuerzas Armadas, a Francisco Reynés y a Pablo Laso y que les convierten por derecho propio en los Leones de EL ESPAÑOL 2020.
Por cuarto año consecutivo nuestro periódico entregará sus galardones en los ámbitos de la solidaridad, empresarial y deportivo. Tres espacios fundamentales en el desarrollo de nuestra sociedad y que con la llegada del coronavirus, serán claves para salir adelante, superar la pandemia y reconstruir la España que emergerá de esta crisis.
En el ámbito de la solidaridad, nuestros nuevos Leones se suman a Ignacio Echeverría -a título póstumo-, Fernando Raigal -el buzo español que colaboró en las labores de rescate de niños tailandeses atrapados-, y Francisco Luzón -exbanquero y creador de la Fundación que lleva su nombre para combatir el ELA. En la empresa entran en la lista en la que está Florentino Pérez, Francisco González e Ignacio Sánchez Galán y en el deportivo a Rafael Nadal, Sergio Ramos y el deporte femenino.
Después de los eventos celebrados en el Teatro Real, el Hotel Westin Palace y la sede del Comité Olímpico Español (COE), en esta ocasión, la entrega de los galardones tendrá lugar el próximo lunes 26 de octubre en el Casino de Madrid.
Será una ceremonia con acceso restringido que será retransmitida en directo por la página de EL ESPAÑOL y que extremará las medidas de precaución para respetar todos los protocolos de protección ante la Covid-19. Unos Leones que además son especiales porque coinciden con el quinto año de vida de este periódico, el 40 aniversario de su presidente ejecutivo, Pedro J. Ramírez, como director de periódicos y un curso en el que se ha convertido en el tercer diario más leído de España.
Las Fuerzas Armadas
Hace más de 200 años, el médico español Francisco Javier Balmis, doctor en Medicina, cirujano honorario de cámara del rey Carlos IV, emprendió un viaje alrededor del planeta para llevar la vacuna de la viruela a todos los rincones del Imperio español. Dos siglos después, el nombre de ese célebre galeno fue el escogido por el Ministerio de Defensa para bautizar la operación de despliegue del Ejército español en la lucha contra el coronavirus.
Durante 98 días, las Fuerzas Armadas se activaron en la que ha sido la mayor movilización militar en España de la historia. En total, 188.713 soldados de todos los ejércitos salieron a la calle a lo largo y ancho de la geografía española para frenar la pandemia. 20.002 intervenciones, 11.061 desinfecciones, 5.301 actuaciones en residencias, otras 3.477 en hospitales o centros de salud y 1.340 en centros sociales de todo el país.
Desde el 14 de marzo se decretó el estado de alarma, el Ejército de Tierra, el Ejército del Aire, la Armada y la Unidad Militar de Emergencias (UME) atendieron centros de la tercera edad, pueblos, incluso ciudades enteras, levantando hospitales de campaña de la nada, gestionando y abriendo morgues improvisadas como el Palacio de Hielo en Madrid. La Operación Balmis se prolongó durante algo más de tres meses, mientras estuvo vigente el decreto del estado de alarma.
Afrontada y superada la primera oleada del combate al virus, en Defensa no se quedaron de brazos cruzados. Era preciso seguir preparando a los suyos para situaciones venideras, ante la amenaza de nuevos rebrotes en todo el país. Fue entonces cuando activaron los engranajes para un nuevo operativo, la Misión Baluarte, una denominación con la que el ministerio quiso resaltar el trabajo de las Fuerzas Armadas "como punto fuerte de la defensa contra el asalto de tropas enemigas". Esta operación continúa activa hasta hoy. El objetivo de la misma es el de formar a personal militar para poder colaborar como rastreadores.
Su labor es vital: consiste en trazar, a petición de las autonomías, un mapa de contagios formado por aquellos que han dado positivo en la Covid-19 y sus contactos estrechos. Un mecanismo de prevención que permite dibujar el avance del virus y anticiparse a él para confinar a los afectados antes de que todo vuelva a expandirse y sea demasiado tarde. La ministra de Defensa Margarita Robles -que recibirá el galardón personalmente en la gala de Los Leones de EL ESPAÑOL- formó en su ministerio a unos 2.000 hombres. Por el momento, 13 autonomías y las ciudades de Ceuta y Melilla han solicitado ya sus servicios.
Francisco Reynés
Francisco Reynés (Palma de Mallorca, 1963) lleva varias décadas labrándose una carrera de gestor en diferentes sectores, pasando de las infraestructuras a las telecomunicaciones y recalando ahora en el energético, donde ha convertido a Naturgy en uno de los principales actores del sector a nivel internacional. La confianza que le otorga el mercado así lo avala y prueba de ello es que su llegada a esta energética se saldó con una fuerte revalorización de la acción y la llegada de inversores relevantes del mercado internacional.
Su prioridad durante los últimos años ha sido la creación constante de valor para todos los stakeholders de Naturgy, pero siempre desde una perspectiva sostenible en el sentido más amplio, donde el compromiso medioambiental, la acción social y el buen gobierno corporativo cobran más importancia que nunca. Con una visión estratega, pragmática y rupturista, Reynés inculca a su entorno la importancia de trabajar de forma colaborativa, comprometida y coordinada como si de una regata se tratase, símil que suele utilizar por su afición por la navegación. También de adaptarse a los cambios y de afrontar los retos con valentía y decisión, sin miedo a los errores y anticipándose a las necesidades del entorno.
En este sentido, Reynés ha sido el máximo exponente de esta filosofía con decisiones que han creado tendencia en el mercado y han supuesto un giro de 180 grados, como fue el cambio de marca de Gas Natural Fenosa a Naturgy, para ser uno de los actores clave de la transición energética gracias al crecimiento en energías renovables y con una clara perspectiva internacional.
Naturgy fue la primera compañía en actualizar las cuentas y modificar el valor en libros de los activos de generación en España (en 2018), principalmente las centrales de carbón, las nucleares y los ciclos combinados de gas. También se adelantó al resto de sus competidores al solicitar el cierre de sus plantas térmicas, con el objetivo de balancear su modelo de negocio hacia un mix energético más sostenible y anticipándose a las necesidades del entorno y de sus stakeholders, cada vez más concienciados con la lucha contra el cambio climático y el cuidado del entorno.
Recientemente, la compañía se ha convertido en uno de los principales inversores de tecnologías limpias en el país y está protagonizando una auténtica carrera en Australia para ser uno de los principales operadores, con la adjudicación de diferentes proyectos eólicos y un pionero sistema de almacenamiento de energía. Su apuesta por la sostenibilidad ha llegado también al máximo órgano de gestión de la compañía con un importante avance hacia la paridad y ha puesto en marcha una Comisión de Sostenibilidad. Reynés ha sabido en menos de tres años imprimir un nuevo rumbo en una de las principales energéticas de España gracias a la simplificación de procesos y a la mejora de las eficiencias, lo que han permitido ganar agilidad y relevancia en un mercado cada vez más competitivo.
Pablo Laso
Cuando Pablo Laso (Vitoria, 1967) aterrizó en el banquillo del Real Madrid fue considerada una apuesta arriesgada de Florentino Pérez y Juan Carlos Sánchez Lázaro, presidente y director de baloncesto del club blanco. Era junio de 2011 y el técnico vasco, sin experiencia como entrenador en Euroliga, había pasado las últimas cuatro temporadas dirigiendo al Gipuzkoa Basket. Pero Laso conocía la casa ya que había sido jugador del Real Madrid entre 1995 y 1997, y rápidamente demostró ser el entrenador ideal para un equipo que buscaba reverdecer laureles con un proyecto ganador. Nueve años después de su fichaje, el técnico español suma 20 títulos y se ha convertido en toda una leyenda del club blanco.
Es el tercer entrenador con más títulos en la historia del Real Madrid, solo por detrás de Lolo Sainz (22) y Pedro Ferrándiz (27). Además, con el vitoriano en el banquillo el equipo puso fin a una mala racha de 19 años sin ganar la Copa del Rey y dos décadas sin conseguir la Euroliga, el máximo título continental. El palmarés de Pablo Laso con el Real Madrid está a la altura solo de los más grandes de la historia del baloncesto europeo: 2 Euroligas, 5 Ligas, 6 Copas, 6 Supercopas y 1 Intercontinental. Con Laso y una gran generación de jugadores, el madridismo volvió a enamorarse del balón naranja gracias a su estilo de juego alegre, rápido y ofensivo que cautivó desde el primer minuto a la afición.
El Real Madrid encontró en Laso la cuadratura del círculo: el resultado y la forma. Un modelo que ha llevado a que el vitoriano dirigiera al Real Madrid en 27 finales de los 37 torneos en los que ha participado durante estos nueve años. El Madrid de Laso ha jugado 20 de las últimas 26 finales entre Euroliga, Liga y Copa.
Especial mérito tiene haber reconquistado Europa con el club blanco y haber sometido también con mano de hierro al Barcelona en un dominio sin igual en la lucha entre los dos grandes equipos del baloncesto español. La Novena (2015) y La Décima (2018) llevarán para siempre el nombre de Pablo Laso. La ansiada corona que el Real Madrid tardó 20 años en reconquistar y que no disfrutaba desde 1995 con Sabonis en su plantilla.
Su décima temporada en el Real Madrid comenzó hace solo unos días con un nuevo título tras doblegar al millonario proyecto del Barcelona en la Supercopa Endesa. Pero para Pablo Laso nunca hay un descanso, ya que siempre está pensando en el próximo partido y en el siguiente reto. Un nivel de autoexigencia a la altura del Real Madrid.