La Comunidad de Madrid ha rendido este domingo un homenaje a las víctimas de la Covid-19, especialmente a aquellas cuyos cadáveres no fueron reclamados, con un minuto de silencio y una ofrenda floral y musical. El PSOE ha tachado la cita de "acto de partido", critiando la ausencia de representantes de las demás formaciones ajenas al Gobierno.
La presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, ha estado acompañada por el alcalde, José Luis Martínez-Almeida, la vicealcaldesa Begoña Villacís, y el vicepresidente, Ignacio Aguado, en un acto en el que ha justificado la gestión de su Gobierno, que "defiende políticas sensatas y moderadas en las que no se enfrente la salud con la economía".
Precisamente la elección de los asistentes ha sido la bala que el PSOE ha utilizado para criticar el acto. En Twitter, el portavoz adjunto de los socialistas en la Asamblea, José Cepeda, ha pedido al Gobierno regional que si quiere realizar un acto de ese tipo "que no utilicen las instituciones de todos".
Diálogo con el Gobierno
En el acto, Ayuso ha insistido en la necesidad de dialogar y negociar con el Gobierno central medidas para paliar los efectos económicos de la pandemia. La presidenta ha defendido medidas "comunes y dialogadas con el Gobierno para convivir con el virus y no rematar la economía".
"Muchas familias lo han perdido todo y nos necesitan, dialoguemos, pactemos, para que todos y cada uno de nosotros demos lo mejor", ha matizado. Almeida también ha apuntado en la misma dirección pidiendo que "desde las instituciones sepamos encarar lo que viene".
"Para este Gobierno el objetivo es que no haya contagios, salvar vidas, pero este virus está causando otras muchas pandemias, como la soledad, por culpa de confinamientos muy severos; y la económica. Por eso defiendo políticas sensatas y moderadas en las que no se enfrente la salud con la economía", matiza.
Fallecidos no reclamados
Ayuso ha descubierto una placa en la fachada principal del edificio de la Real Casa de Correos, sede del Gobierno regional, donde ha depositado una corona de laurel en memoria de todos los fallecidos por coronavirus.
Igualmente, se ha realizado un minuto de silencio por las víctimas de la pandemia, y la Orquesta y Coro de la Comunidad de Madrid (ORCAM) ha interpretado el aria Lascia ch’io pianga (Déjame llorar) de la ópera Rinaldo, de Haendel.
El Gobierno regional ha explicado que en julio pasado inhumó a más de medio centenar de fallecidos por coronavirus, al no haber sido reclamados los cadáveres por sus familiares, y ha dedicado el homenaje especialmente a estas víctimas.
Ante esta situación, la Consejería de Justicia, Interior y Víctimas decidió inhumar los cuerpos, que permanecían en el Instituto de Medicina Legal, uno de los depósitos provisionales de cadáveres puestos en marcha en la primera ola de la pandemia.