Había muchas ganas de dejar atrás el 2020 y recibir el 2021, un año en el que todos tenemos tantas esperanzas depositadas, pero las restricciones imponían unas celebraciones austeras y atípicas. La pandemia del coronavirus y el aumento de casos obligó a celebrar la Nochevieja de manera insólita: con las calles desiertas, un toque de queda que oscilaba entre las 22.00 horas y las 01.30 horas, dependiendo de las comunidades autónomas y las reuniones limitadas a 6 o 10 personas, según la zona de España.

El mensaje de las autoridades era claro: hay que frenar la tercera ola, que parece ya imparable, y para ello hay que seguir con las medidas de seguridad incluso en fechas tan señaladas. Después de las Navidades, que son por tradición un evento más familiar, muchas de las comunidades aumentaron incluso las restricciones para Nochevieja, por miedo a que las fiestas dispararan los contagios en los primeros días de enero.

Sin embargo, pese a las limitaciones a la movilidad nocturna, los controles policiales y los constantes avisos de las autoridades, han sido muchos los incumplimientos por parte de la población y la policía tuvo que desalojar cientos de fiestas ilegales en España.

Madrid

La mayoría de las concentraciones ilegales han tenido lugar en Madrid. La Nochevieja en la capital ha dejado 185 fiestas en casas y dos locales con exceso de aforo.

La intervención de los servicios de emergencias se ha llevado a cabo entre las 20.00 horas del jueves y las 8.00 horas de este viernes. La Policía Municipal de Madrid ha recibido 951 llamadas. De las denuncias, 29 eran por ruidos, dos por exceso de aforo en locales, 123 por petardos, 58 por la música alta, 185 por fiestas en domicilios, y 52 agresiones y reyertas.

Fiestas en Cataluña

También en Cataluña, los Mossos d'Esquadra han sido llamados a desalojar cuatro fiestas ilegales esta Nochevieja que incumplían las medidas contra la Covid-19, según ha explicado el conseller de Interior de la Generalitat.

Los Mossos no prevén desalojar a las más de doscientas personas de varias nacionalidades que llevan más de 21 horas en una fiesta "rave" ilegal para celebrar la Nochevieja en una nave del municipio barcelonés de Llinars del Vallès, suceso por el que hasta el momento se ha denunciado a cuatro participantes.



Fuentes de los Mossos explican que en el entorno de la nave hay aparcados unos doscientos vehículos, por lo que la policía catalana, "por criterios de oportunidad, congruencia y proporcionalidad", ha decidido esperar a que los asistentes a esta fiesta ilegal salgan por su propia voluntad y evitar con ello graves incidentes.

La nave está custodiaba por efectivos de la policía local de Llinars y efectivos de los Mossos de las unidades de seguridad ciudadana, antidisturbios ARRO y tráfico.

La nave no se desalojará "para evitar desórdenes y que la gente puede acabar dañada", han agregado las fuentes.

Las mismas fuentes han explicado que cuando uno de los asistentes a la fiesta abandona la nave "se le identifica y se tramita la correspondiente denuncia", entre otras cosas por asistir a una fiesta prohibida con motivo de la COVID-19.

La fiesta fue denunciada por los vecinos de la zona sobre las 21 horas de ayer y, según estos mismos vecinos, está previsto que se alargue hasta el 4 de enero. E

La policía catalana también ha denunciado un hotel de Santa Perpètua de Mogoda (Barcelona) por una fiesta fuera del horario permitido; ha intervenido en una fiesta en una discoteca de Cornellà de Llobregat (Barcelona) y en otra con 16 personas en una casa de colonias en Esponellà (Girona).

Ibiza

En Ibiza, la Policía ha intervenido en doce fiestas privadas en domicilios durante el dispositivo especial de Nochevieja, y ha cerrado dos locales que incumplían las normas.

En las casas había más de las diez personas permitidas, por lo que los agentes han levantado actas de las infracciones detectadas. La Policía ha intervenido también en dos locales que seguían abiertos a las 01.30 y 02.00 horas y con gente consumiendo en el interior. Los establecimientos han sido desalojados y se han levantado también las correspondientes actas.

En total, la Policía Local ha abierto 36 actas contra ciudadanos que han incumplido el toque de queda; siete por no llevar mascarilla y otras once por incumplir ordenanzas municipales.

Mallorca

Asimismo, la Guardia Civil también denunció al propietario de una pizzería de Son Servera, en Mallorca, por tener en el interior de su local a decenas de personas, que al aproximarse la patrulla abandonaron el lugar a la carrera.

Cabe recordar que en Mallorca no se permite el uso de interiores de bares y restaurantes al encontrarse en nivel máximo de alerta por la Covid-19, y que las reuniones sociales están limitadas a seis personas. 

La Coruña

En La Coruña, los agentes han intervenido a las cuatro de la madrugada una fiesta en un polígono industrial con presencia de una veintena de personas, menores de edad incluidos. Tras proceder a la preceptiva identificación, este ilícito ha sido propuesto para sanción, señala un comunicado remitido a la prensa.

La Policía Nacional y la Guardia Civil desplegaron el pasado jueves en Galicia, día de Fin de Año, un total de 667 dispositivos de seguridad para controlar el cumplimiento de las restricciones y efectuaron 186 propuestas de sanción, tal y como ha informado la Delegación del Gobierno.

Los controles enfocados a vigilar el acatamiento de las medidas decretadas por la Xunta para hacer frente a la propagación de la covid-19 llegaron este jueves a 3.629 personas y 1.739 vehículos.

Cotillones ilegales

En el País Vasco, la Ertzaintza sancionó a 81 personas, la mitad de ellas por participar en "cotillones" en un hotel de Bilbao y un alojamiento rural de la comarca guipuzcoana de Urola Kosta, mientras que la Policía Local de Vitoria ha interpuesto 15 denuncias a los asistentes a una fiesta ilegal.

En Bilbao fue el propio recepcionista del hotel quien ha avisado a la Ertzaintza para informar de que en varias habitaciones habían entrado más personas de las que estaban legalmente registradas. Los recursos policiales han identificado y denunciado a un total de 21 personas, repartidas en tres habitaciones, por incumplir la prohibición de realizar celebraciones en alojamientos públicos.

En Vitoria, la Policía municipal ha denunciado a 15 personas que participaban en una fiesta ilegal en un pabellón del polígono industrial de Ali Gobeo. Fuentes municipales han explicado a Efe que los agentes descubrieron la fiesta tras detectar a un conductor embriagado en la calle donde se estaba celebrando.

En San Sebastián, la Guardia Urbana ha detectado 11 fiestas que se celebraban en viviendas y locales y se ha denunciado además a 11 personas por participar en botellones en la calle. En la mayoría de los casos, las autoridades han actuado en fiestas debido a avisos de vecinos por el ruido, y no por infringir las normas relativas a las reuniones, ya que la mayor parte cumplía el límite de seis personas.

Toque de queda

Además de las fiestas ilegales, varias comunidades han registrado infracciones del toque de queda. Es el caso de Salamanca, donde la Policía Local ha propuesto para sanción a 45 personas por incumplir los horarios del toque de queda, además de sancionar a 11 por el incorrecto uso de la mascarilla y se han intervenido en tres fiestas en viviendas y en otras tres en espacios privados.

También en Valencia se han denunciado anoche a 79 personas por incumplir la restricción de la movilidad entre las 12.00 y las 6.00 horas de la mañana y a 15 locales por incumplir la normativa sanitaria de Covid-19, además de levantar 20 actas por contaminación acústica provocadas por fiestas en domicilios y denunciar a 20 personas por no llevar mascarilla.

Por otro lado, en Alicante los agentes municipales han disuelto 46 fiestas en viviendas, y han sancionado a 12 establecimientos por incumplir aforos y las medidas de seguridad frente al covonavirus. También han denunciado a 53 personas por incumplir el toque de queda, en controles de alcoholemia o por infracciones de tráfico.