Pablo Casado no ocultaba este lunes, durante un acto del PP en Córdoba, su indignación por las informaciones que sugieren que estaría "bloqueando" la renovación del Tribunal de Cuentas.
El órgano que precisamente este martes debe resolver un expediente por la responsabilidad contable de los cargos de la Generalitat en el procés que afecta, entre otros, a los expresidentes Artur Mas y Carles Puigdemont y a dos de los indultados, el líder de ERC Oriol Junqueras y Raül Romeva.
"¿Pero aquí quién bloquea al Tribunal de Cuentas? Lo hará el PSOE" se interrogaba de manera tan retórica como airada el líder de la oposición, quien calificaba como "el colmo" que ante esa actuación del Tribunal de Cuentas el ministro y número tres socialista, José Luis Ábalos dijera que, en palabras de Casado, "van a retirar las piedras del camino".
Y añadía: "El Tribunal de Cuentas cumple su labor ¿O es que además de ver cómo indultan a los presos que han dado un golpe a la legalidad también tenemos que pagar su corrupción y su malversación de fondos públicos?".
Un "déjà vu"
Además, el presidente del PP se maliciaba, asegurando haber tenido un "déjà vu", que las intenciones del Gobierno pueden ser las de reformar la propia naturaleza de ese tribunal.
"Nos desayunamos con una información, la semana que viene, como supuestamente el PP bloquea, sale un partido del Gobierno, será Podemos, diciendo que hay que desbloquear y una semana después saldrá el PSOE diciendo 'registramos una proposición de ley para modificar, por la gatera, por primera vez en cuarenta años el sistema de mayorías reforzadas que consagra la Ley orgánica del Tribunal de Cuentas' para elegirlo a dedo, por la mayoría simple del Gobierno" concluía, asegurando que es lo mismo que ha hecho Pedro Sánchez con el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).
Casado contestaba también, sin citarla expresamente, a la ministra de Igualdad, Irene Montero, quien preguntada por la actuación del Tribunal de Cuentas utilizaba la misma expresión, "piedras en el camino", de Ábalos, abogando además por "eliminar todo lo que no sea eminentemente, protagónicamente político: el diálogo y el acuerdo".
Escandalizado, el líder de los populares volvía a utilizar la interrogación retórica: "¿Pero esto qué es? ¿Esto es Venezuela? ¿Esto es Nicaragua? ¿Esto es Cuba? Apuntamos a los jueces, apuntamos a los fiscales que no cumplen las directrices políticas de Dolores Delgado [la Fiscal General del Estado] y ahora apuntamos a los señores miembros y vocales del Tribunal de Cuentas... yo creo que esto es algo de extraordinaria gravedad" concluía.