El Gobierno ha propuesto a la exministra de Educación y Formación Profesional, Isabel Celaá, como nueva embajadora del Vaticano, un cargo para que el que la Santa Sede debe dar el plácet antes de acceder al mismo. La exministra salió del Ejecutivo en la última remodelación de julio y dejó la cartera de Educación y Formación Profesional a Pilar Alegría. También fue portavoz del Gobierno en la primera legislatura de Pedro Sánchez, un puesto que cedió a la actual titular de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero.
La información, adelantada por 'elDiario.es' y confirmada a Europa Press señala que Celaá sustituiría a Carmen de la Peña Corcuera que desde noviembre de 2018 ocupa el cargo diplomático en el Vaticano.
La exministra, profesora de profesión, ejerció de consejera de Educación, Universidades e Investigación en el Gobierno del PSE-EE, presidido por Patxi López, desde el año 2009 al 2012. Impulsó la reforma de la Educación Pública Vasca, apostando por el trilingüismo y la incorporación de nuevas tecnologías en centros escolares.
Comenzó sus responsabilidades institucionales en materia de educación en 1987 para posteriormente ocupar, en el Parlamento Vasco, cargos de vocal en la Comisión de Agricultura y Pesca, así como en la Comisión de Sanidad y en la Comisión de Educación y Cultura, entre otros puestos, en la VI Legislatura del Gobierno Vasco, donde era parlamentaria del Grupo Socialistas Vascos-Euskal Sozialistak.
De esta manera, Celaá sigue los pasos del exministro de Cultura y Deporte José Manuel Rodríguez Uribes, que fue nombrado por el Consejo de Ministros como nuevo embajador ante la UNESCO tras su salida del Ejecutivo. Según la Asociación de Diplomáticos Españoles (ADE), hay cinco embajadores 'políticos': en Andorra, Angel Ros Domingo; el de Cuba, Ángel Martín Peccis; la de la OEA, Carmen Montón, y el de la OCDE, Manuel María Escudero.