Abascal alerta del "drama" de la sumisión química por pinchazo mientras las CCAA piden prudencia

Varios gobiernos autonómicos han pedido hoy tranquilidad frente a la creciente ola de denuncias de pinchazos a mujeres, ya que aseguran que ninguna de las afectadas ha sido víctima de delitos de carácter sexual, ni se han hallado sustancias tóxicas en la “práctica totalidad” de análisis realizados.

Como contrapunto, el líder de Vox, Santiago Abascal, ha compartido en sus redes un mensaje de alarma y “gravedad” ante el “drama real” de la sumisión química.

Las denuncias de mujeres que aseguran haber sentido un pinchazo mientras estaban de fiesta se han disparado en los últimos días. Frente a esta tendencia, varias Comunidades Autónomas han optado por revisar sus procedimientos de actuación ante posibles casos de sumisión química.

[162 casos entre 9.331 agresiones sexuales desde 2019: los datos oficiales sobre la sumisión química]

La consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales del País Vasco, Beatriz Artolazabal, ha trasladado un mensaje de prudencia debido a que no existe vinculación entre las denuncias por pinchazos y las de agresión sexual. Por ello, aunque condena la práctica, Artolazabal considera que “la verdadera amenaza” es "el miedo".

Los Ejecutivos extremeño, cántabro, valenciano, aragonés, aun reconociendo que la denuncia de pinchazos es un “problema emergente” y han diseñado planes de refuerzo para controlar este tipo de casos, recuerdan que no se están recogiendo analíticas positivas en sustancias de drogas entre las denunciantes.

Abascal se ha pronunciado sobre los ataques con jeringuillas con un tono distinto, de alarma, y ha acusado a “feministas oficiales, mandarines progres y palmeros mediáticos” de “ocultar los dramas reales”.

Así, el líder de Vox alude a los medios de comunicación y al Gobierno para afirmar que “nunca les ha importado la seguridad real de las mujeres”.

En una línea también alarmista también se ha expresado Pere Aragonès al animar a los ciudadanos a “estar alerta y denunciar”. El presidente de la Generalitat de Cataluña ha afirmado además que esta cuestión “nos interpela a todos”, y no es exclusiva de “las mujeres cuando van de fiesta”.

El País Vasco suma ya una docena de denuncias, y en Cataluña superan las veinte. La Comunidad Valenciana, a pesar de no haber registrado denuncias, ha puesto en marcha un refuerzo de la presencia policial en zonas de mayor aglomeración para poder prevenir así pinchazos y agresiones sexuales.

[Preocupación en Castilla-La Mancha por los pinchazos a mujeres en fiestas y discotecas]

Si bien las denuncias de casos de sumisión química con jeringuilla se llevan produciendo desde el inicio del verano en distintos puntos de Europa, en España los pinchazos no han conllevado ninguna agresión sexual.

Salvo una, todas las analíticas realizadas han arrojado resultados negativos en sustancias tóxicas. La excepción es el caso de una menor de 13 años que denunció un pinchazo en las fiestas de Montevil (Gijón) y dio positivo en éxtasis en las pruebas realizadas en el hospital de Cabueñes.

Joaquim Boadas, secretario general de Fecarsam (patronal del ocio nocturno), se ha sumado al llamamiento a la calma, y avala que “las discotecas son seguras”. Además, prevé que la tendencia “irá a la baja”, "imitando" el comportamiento de la curva en "Francia y Reino Unido".