Feijóo propone descuentos a familias y empresas del 5% al 40% en la luz y el gas si reducen su consumo

El documento lleva por título Propuestas para un pacto energético que proteja a las familias y empresas. Se trata de un plan con 53 medidas ideadas con expertos y exministros. Uno de esos 53 puntos plantea un ahorro progresivo para las familias y las empresas en función de que reduzcan el gasto de energía.

Aquellas familias o empresas que empiecen a consumir entre un 3% y un 7% menos, se beneficiarían de un descuento del 5% en la luz y un 10% en gas. Si logran ahorrar un 15%, el PP plantea que el descuento pueda llegar a ser de entre el 20% y el 40%.

Estas medidas de ahorro se mantendrían durante todo el próximo invierno, hasta la llegada de la primavera, tal y como confirmó Juan Bravo, vicesecretario de Economía del Partido Popular, en una entrevista a EL ESPAÑOL-Invertia.

Fuentes de la formación explican que también hay apartados para "desmontar las mentiras de Sánchez". Por ejemplo "que haya dicho que España ha exportado unos 2.400 gigavatios hora de gas en forma de electricidad a la UE". Según el PP la cifra "no llega a 700 gigavatios". 

El PP apostará por las recomendaciones frente a las obligaciones. La eficiencia será una de las claves. Otra es su apuesta por "alargar la vida útil de las centrales nucleares". Creen que, de no seguir el Gobierno esa recomendación, "se perderán mil megavatios de la noche a la mañana".

Cuidar la industria

El PP pide en esas propuestas cuidar con mimo la industria de la energía en España, clave para la subsistencia de 2,7 millones de empleos. También recuperar las 14 centrales térmicas que se han ido apagando durante los últimos años. Según las estimaciones del partido, estas producían el 14% de la energía.

Otro punto novedoso será la posibilidad de que la AIReF "analice el ámbito energético". Los populares ponen sobre la mesa que este organismo pueda hacer "estudios independientes" en este campo, lo que ayudaría a "despolitizar" la energía. Es decir, que verdaderos especialistas en energía sean quienes opinen sobre el asunto.

[El plan Feijóo: 53 medidas ideadas con expertos y exministros que enviará esta semana al Gobierno]

El documento, que será un pacto, pedirá "dotar de tranquilidad a las nucleares, garantizando sus objetivos de 10 o 15 años". El Partido Popular explica que se tiene que alcanzar un "pacto energético" con el Gobierno que trascienda a las formaciones políticas y que perdure en el tiempo. 

"No hemos sido capaces de suplir el hueco que dejaron las centrales de carbón. Todas las energías son necesarias, la nuclear es segura y está implantada en el territorio", recuerdan desde Génova.

Como ya ocurrió en abril con el plan económico, el Partido Popular renunciará a sus siglas para esta propuesta, ya que en la portada sólo incluirán el escudo de España. Fuentes de la formación explican a EL ESPAÑOL que esto se debe a "que es un documento al servicio del país, que se le entrega a Moncloa sin iconos partidistas. Es política de Estado".

Nerviosismo en Moncloa

En el PSOE han dejado caer que se trata de un farol, pero en Génova piden paciencia para hacerlo público: "Se enviará por igual a Moncloa y a los periodistas". Hasta entonces, tratan de mantener en secreto las medidas.

Moncloa mostró cierto escepticismo a la vez que nerviosismo. Se trata del segundo gran plan que prepara la dirección popular. Y aunque Sánchez cargó duramente contra las propuestas de Feijóo en el debate, el único anuncio de calado en materia energética fue, precisamente, una medida que ya habían solicitado los populares. 

Según ha podido saber este periódico una veintena de personas llevan desde el Debate sobre el estado de la Nación trabajando con el PP en el pacto energético, entre ellos exministros y expertos. La persona encargada de coordinar los trabajos es Juan Bravo, responsable económico del partido.

El partido es consciente de que las consecuencias de un corte de suministro de gas ruso pueden ser devastadoras. De hecho, Feijóo fue de los primeros políticos en manifestar la importancia de subir el aire acondicionado en verano o bajar la calefacción para reducir el consumo de energía.

Cuando el Gobierno presentó sus medidas, sin embargo, se desencadenaron una serie de críticas por parte del PP que fueron impulsadas por la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso, que se negó a cumplir algunas normas. Desde entonces los populares han intensificado el trabajo para contraponer la acción del Gobierno.