El presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha exigido al PP "una respuesta clara" sobre si apoya la solución ibérica para limitar el precio de la energía, que pasa por topar el del gas, así como para otras de sus últimas propuestas, como subir las pensiones y el salario mínimo según el IPC.
En un acto del partido celebrado en Soria, Sánchez ha centrado su intervención en pedirle al PP y a su líder, Alberto Núñez Feijóo, que se fijen en el Reino Unido para que vean las "consecuencias de sus políticas" de bajada de impuestos. "Las políticas publicas se tienen que financiar con ingresos públicos y eso son los impuestos de todos y, singularmente, de los que más tienen".
Sánchez ha insistido en que su Gobierno tiene "objetivo, método y compromiso" para que "nadie se quede atrás" en la actual crisis económica y social derivada, ha dicho, de la invasión de Putin en Ucrania, que ha provocado el alza de los precios y de la energía.
Con los más de 3.000 millones de euros que el Ejecutivo pretende recaudar de estos nuevos impuestos, ha dicho, se podrían pagar, por ejemplo, los 2.200 millones de euros que destina a becas o 1.200 a Formación Profesional. "Las políticas públicas se tienen que financiar con los ingresos públicos y esos son los impuestos de todos y, singularmente, los de los que más tienen".
En este sentido, ha recordado que el Ejecutivo ha aprobado diez paquetes de respuesta a la crisis desde el mes de junio y ha abogado por sacar lecciones de "estos años duros" en los que pedían más apoyo del Estado del Bienestar durante la pandemia, ahora "claman por bajadas indiscriminadas de impuestos".
Sánchez ha subrayado que en "tiempos de miedo e incertidumbre" los responsables políticos "del Gobierno y de la oposición" tienen "la obligación de dar certezas", por lo que ha instado al líder popular, Alberto Núñez Feijóo, a aclarar si apoya topar el precio del gas, revalorizar las pensiones y el salario mínimo, y aumentar los gravámenes a las grandes energéticas, bancos y fortunas.
"Ambigüedad calculada"
Nuevamente, ha reprochado la, a su juicio, ambigüedad que muestra el PP en esta materia. "Mientras otros no sabemos qué piensan porque no se posicionan, en esa ambigüedad calculada", aseguró, para luego concluir: "A estas alturas de la historia ya sabemos muy bien qué piensa el Partido Popular y qué intereses defiende y qué intereses no defiende, que son los de la mayoría social de este país".
"Vamos a defender el Estado del Bienestar porque es lo que cohesiona social y territorialmente una nación", ha remarcado Sánchez. Así, buscaba responder a los que "desde la derecha" dicen que "el dinero está mejor en los bolsillos de los ciudadanos".
A esos, dijo el presidente, les insta a que calculen lo que cuesta, por ejemplo, un trasplante de corazón con una "sanidad pública, universal y gratuita" como es el caso de España, que se sitúa en los 90.000 euros, frente al millón y medio de dólares que hay que pagar en Estados Unidos.
O los 6.000 euros de coste por alumno en la educación pública y los 9.000 en estudios universitarios. "Yo quiero un país en el que los ciudadanos se hipotequen por la compra de un piso o un coche, pero no por llevar a sus hijos a la escuela", ha señalado Sánchez en Soria, donde ha estado acompañado del secretario general de la formación en Castilla y León, Luis Tudanca.
Por eso, Pedro Sánchez ha insistido en hablar de "justicia social y fiscal", que se plasma en ayudar a la clase media y trabajadora, con reducciones por ejemplo en el IVA de luz y gas, pero también en que las grandes entidades financieras y energéticas, así como las grandes fortunas "arrimen el hombro" en estas circunstancias.
En este punto, ha defendido la revalorización de las pensiones, que suponen un 12% del Producto Interior Bruto, frente al 16% de Alemania o el 14% de Portugal. El problema de España, ha afirmado, no son las pensiones, sino que "quien tiene el problema es la derecha política, mediática y económica, que quiere convertir en mercancía lo que es un derecho".
Al respecto, ha recordado que en noviembre de 2020 se renovó el Pacto de Toledo, con la única oposición de "la ultraderecha", si bien recordó al PP, que sí votó a favor, que en dicho pacto se garantiza la revalorización de las mismas teniendo en cuenta el coste de la vida.