Decenas de miles de personas se han congregado este sábado en Madrid para protestar contra la "deriva anticonstitucional" del Gobierno y para atacar al presidente, Pedro Sánchez, por "traidor". Bajo el lema 'Por España, la Constitución y la democracia', los asistentes corearon gritos contra el máximo dirigente del PSOE y pidieron su dimisión. "No se trata de izquierdas, derechas o centro, sino que se trata de no permanecer impasible ante la grave erosión de nuestras instituciones, el deterioro de nuestra democracia y el debilitamiento de nuestro Estado", han asegurado en la lectura del manifiesto.
A la cita, convocada por un centenar de organizaciones cívicas, se unieron personalidades de Vox como Santiago Abascal o Iván Espinosa de los Monteros y de Ciudadanos como la diputada Inés Arrimadas o la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís. La gran ausencia ha sido la de Alberto Núñez Feijóo, líder del PP. De los representantes populares solo han acudido los vicesecretarios generales de Coordinación Autonómica y Local, Pedro Rollán, y de Organización, Miguel Tellado, la presidenta de Nuevas Generaciones, Beatriz Fanjul o la diputada Cayetana Álvarez de Toledo. Todos han resaltado que su asistencia era a título personal.
"Este acto es para que no fracase España. Los políticos tienen una responsabilidad y aquí somos gente de distintos lugares pero con valores y objetivos comunes: luchar por la libertad y la democracia", ha declarado Álvarez de Toledo en compañía de Arrimadas y Villacís. La diputada del PP ha alertado del evitar el "fracaso" del país y ha agradecido que "tantos españoles" se hayan movilizado y hayan asumido "su responsabilidad cívica en defensa de la España de la democracia y la Constitución".
Miles de personas se manifiestan en Cibeles contra Sánchez y su Gobierno
La plaza de Cibeles, donde se ubicaba el escenario principal de lectura del manifiesto, se ha ido llenando desde las 11 de la mañana. Las 31.000 personas que se han concentrado, según Delegación de Gobierno (los organizadores han aumentado la cifra a medio millón), caminaban por el Paseo del Prado, la Puerta del Sol o Recoletos hacia este punto central, coronado por el Ayuntamiento de la ciudad y con la fuente de la diosa Cibeles en el medio.
Sin altercados y con una duración aproximada de una hora, los reunidos han alertado de la "rotura de España", lanzando proclamas contra Pedro Sánchez y pidiendo su "dimisión". Júlia Calvet y Nacho Trillo, encargados de leer el manifiesto y procedentes de las agrupaciones S'ha acabat! y Resiste España, remarcaron la "deriva política" hacia un "plan de mutación constitucional" acordado con "los representantes del populismo totalitario, los nacionalistas secesionistas y los herederos del discurso del terror de ETA".
Poco antes, los representantes políticos que han asistido defendían su participación contra el intento de "aplastar" la Constitución de Sánchez y sus apoyos en el Gobierno. Santiago Abascal, líder de Vox, ha comentado que se manifestaba contra "el peor" Ejecutivo "de la historia" de España y que abogaba por la "expulsión" de una formación con "ideologías totalitarias".
"Estamos ante el Gobierno de los pactos oscuros con todos los enemigos del orden constitucional", indicaba Abascal, tachando a Pedro Sánchez de "autócrata". Inés Arrimadas, en una breve intervención, ha resaltado el "peligro" para España que supone el presidente del Gobierno. "Está disolviendo las instituciones y los que pactan con Bildu no nos van a hacer agachar la cabeza. Hay que salir a la calle, y también a las urnas. Tenemos que manifestarnos por la libertad y la democracia", aseguró.
"Hay tres palabras que a todos los constitucionalistas no nos tienen que dar miedo y siempre tenemos que reivindicar: España, Democracia y Constitución", ha añadido Begoña Villacís, apuntando que cree en estos conceptos y decidida a defenderlas en la calle.
A su alrededor, gente agitando banderas de España o pancartas donde se leía "Pedro Sánchez Okupa", "Sanchez felón", "Sánchez, Otegui, Puigdemont a prisión" o "No te olvidamos, rata de dos patas" con el rostro del presidente del Gobierno. En la multitud se ha podido ver a personalidades de la cultura como el filósofo Fernando Savater o el escritor Andrés Trapiello. "Estamos en contra de lo que hay ahora. Están legislando a golpes. No queremos que se reforme más la constitución", expresaban Sara y Marisa Martín, dos hermanas madrileñas de 63 y 67 años respectivamente.
"Vengo a poner mi grano de arena y a echar a este sinvergüenza", afirmaba Esteban, de 53 años. "Están, poquito a poquito, atacando a todas las fuentes. Y hay un plan oculto para mantenerse en el poder", espetaba. "He venido, básicamente, a pedir la dimisión de Pedro Sánchez, que es probable, el presidente más mentiroso de Europa", explicaba un afiliado de Vox que llevaba un escudo para "protegerse de perroflautas indocumentados".
Un grupo de chicos y chicas de 16 años subrayaba que estaba por España y para que se fuera "esta panda de corruptos". "Estoy aquí para defender la patria de este Gobierno socialcomunista que nos tiene a todos los españoles oprimidos", esgrimía Jaime García, uno de los integrantes.
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Durante la manifestación se escuchaban abucheos cada vez que se mencionaba a Pedro Sánchez o algún nombre del Gobierno y se han repetido las consignas que hablaban de "lectura partidista" de la Carta Magna, indicando las rebajas de condena a maltratadores de mujeres por la Ley del 'sí es sí' o a la derogación de la pena de sedición.
Mientras la concentración tenía lugar en Madrid, Pedro Sánchez ha protagonizado un acto del partido en Valladolid. Desde la capital de la Comunidad de Castilla y León, el presidente de Gobierno se ha dirigido a los "nostálgicos" de Cibeles diciendo que "hoy se cumple la Constitución en toda España" y la "amenaza de la quiebra de la convivencia va quedando cada vez más lejos".
Núñez Feijóo, que faltó a la cita y evitó así una foto como la de la Plaza de Colón en 2019, alegó posteriormente que la manifestación era "una defensa de la democracia y la Constitución" ejercida "con serenidad y argumentos, lejos del ruido independentista y de las comparaciones gratuitas". Díaz Ayuso, que tampoco fue, también había respaldado "rotundamente" la cita y deseó que fuera "un éxito".
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