El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha mostrado a los dos dirigentes israelíes, el primer ministro, Benjamín Netanyahu, y el presidente, Isaac Herzog, su desacuerdo con la respuesta de Israel —bombardeos e incursiones terrestres en la Franja de Gaza— a los ataques perpetrados por Hamás el pasado 7 de octubre. "La cifra de palestinos muertos es verdaderamente insoportable", ha lamentado Sánchez ante Netanyahu.
Antes de reunirse con el primer ministro israelí, el jefe del Ejecutivo español comunicó a Herzog que "la respuesta a los atentados de Hamás no puede implicar la muerte de inocentes, incluidos miles de niños". También ha dejado claro que Israel tiene derecho a defenderse, pero que "debe cumplir con el Derecho Internacional", una exigencia que Sánchez ha transmitido tanto a Netanyahu como a Herzog.
Sánchez ha sostenido que la lucha contra el terrorismo no se puede ejecutar sólo con la fuerza, en referencia a los ataques de Israel sobre Gaza que tienen como objetivo a miembros de Hamás, según Israel, pero que han dejado al menos 14.000 muertos en la Franja desde que el conflicto estalló a principios de octubre, según datos de las autoridades gazatíes.
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El presidente Sánchez ha recordado la experiencia española con el terrorismo de ETA. "Durante decenios, España padeció el azote del terrorismo, y podemos comprender muy bien el dolor y la frustración de Israel. Las atrocidades cometidas por el grupo terrorista Hamás son absolutamente estremecedoras. Porque también lo hemos sufrido en España, estoy convencido de que el terrorismo no puede erradicarse exclusivamente mediante el uso de la fuerza", ha explicado.
"El mundo entero está impresionado por las imágenes que vemos a diario de Gaza", ha lamentado Sánchez.
En línea con lo que le transmitió a Herzog, el presidente español condenó ante Netanyahu los ataques de Hamás, pero reiteró que la respuesta de Israel debe ser proporcionada y debe evitar el sufrimiento de la población civil palestina.
Sánchez ha remarcado la importancia de que se facilite la entrada de ayuda humanitaria en la Franja de Gaza "inmediatamente". "Pedimos que todos los civiles sean protegidos y que la ayuda humanitaria entre inmediatamente en Gaza. Hay riesgo de que la gente muera inmediatamente", ha advertido.
Las reuniones de Sánchez con los dirigentes israelíes se celebran en el marco de una ronda de reuniones del recién investido presidente, que se reunirá esta tarde con el presidente de la Autoridad Nacional de Palestina, Mahmud Abás. Para finalizar su viaje, se desplazará este viernes a Egipto para reunirse con el mandatario egipcio, Abdel Fatah al Sisi, y el secretario general de la Liga Árabe, Ahmed Aboul Gheit.
Como estaba previsto, Sánchez ha comunicado a Herzog que "la mejor" solución al conflicto es la de "los dos estados", que implica el reconocimiento del Estado palestino. "Es la mejor manera de derrotar al terrorismo y de garantizar la seguridad en Israel", ha asegurado.
En las reuniones también ha estado presente el primer ministro belga, Alexander de Croo, que asumirá la presidencia rotatoria del Consejo de la Unión Europea el 1 de enero de 2024, relevando a España.
Sánchez, acompañado por la embajadora española en Israel, Ana Sálomon Pérez, entre otras personas, ha aprovechado la ocasión para insistir en su propuesta de celebrar en los próximos meses una conferencia de paz sobre el conflicto palestino-israelí en España con el objetivo de avanzar en la posible solución que reconozca al Estado de Palestina.
Al inicio de la reunión, Sánchez ha condenado los ataques perpetrados por la organización palestina Hamás en Israel el pasado 7 de octubre, que provocó la gran escalada del conflicto, y recalcó que España comparte el dolor de los israelíes. También ha reiterado que los rehenes en manos de Hamás sean liberados.
Asimismo, ha valorado de forma positiva el acuerdo de alto el fuego entre Hamás e Israel que, en principio, se iniciará este viernes y durará cuatro días. El pacto incluye el canje de rehenes israelíes en manos de Hamás a cambio de prisioneros palestinos en Israel.
La visita de Sánchez a Israel no llega en el mejor momento de las relaciones entre ambos países. Cabe destacar que el presidente español es uno de los últimos líderes de la UE en viajar al país, no sólo porque estaba en funciones sino porque se llegó a una leve crisis diplomática provocada por un comunicado de la Embajada israelí en Madrid muy contundente con el Gobierno de coalición en respuesta a algunas declaraciones de ministras de Podemos y Sumar sobre el conflicto.
Sánchez, por su parte, junto al ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, siempre ha condenado sin paliativos el atentado de Hamás en Israel que dejó más de 1.200 muertos el 7 de octubre. El Gobierno siempre ha incidido, sin embargo, en que el Ejecutivo de Netanyahu debe cumplir con el Derecho Internacional, en línea con la posición de la ONU, liderada por Antonio Guterres, también muy criticado por Israel, que ha llegado a pedir su dimisión.