Robles reprocha a los fabricantes el retraso en la entrega del blindado Dragón al Ejército

La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha trasladado este lunes a las empresas que configuran el consorcio Tess Defence -Indra, Escribano, Sapa Plasencia y Santa Bárbara Sistemas- su "gran preocupación" por "la falta de avances y por el nivel de cumplimiento" del programa para la entrega de 348 vehículos de combate sobre ruedas (VCR) 8x8 Dragón al Ejército de Tierra.

"Nos gustarían mayores avances". Es la segunda vez en menos de 10 días que Robles da un toque de atención ante el retraso de un contrato millonario y crucial para la industria de defensa en España.

La fabricación de estos vehículos supone un avance fundamental para las Fuerzas Armadas. El acuerdo con esas compañías se realizó en el marco de un contrato valorado en unos 2.000 millones de euros. En concreto, el Ministerio de Defensa firmó en 2020 el contrato de suministro de fabricación de los vehículos 8x8 Dragón con este consorcio para la adquisición de esa cantidad de vehículos.

La compra de estos vehículos está en marcha desde el año 2007, pero se fue retrasando por diversos motivos y el contrato firmado en 2020 ya contemplaba que serían entregados progresivamente, hasta el año 2030.

En este contexto, Robles, acompañada de la secretaria de Estado de Defensa, Amparo Valcarce, se ha reunido este lunes con los directores ejecutivos de Santa Bárbara Sistemas, Juan Escriña; de Indra, José Vicente de los Mozos; Escribano, Ángel y Javier Escribano; y Sapa Plasencia, Ibon Aperribay, a quienes ha transmitido su "gran preocupación" por "la falta de avances y por el nivel de cumplimiento" del programa.

[Los retrasos lastran el proyecto estrella del Ejército: no habrá 'Dragones' hasta 2020]

La titular de la cartera también ha pedido la contratación de mayor capacidad de ingeniería en Tess y aumentar el ritmo de fabricación, incluyendo una nueva línea de producción en la factoría de Trubia (Oviedo), a la vez que ha solicitado agilizar las entregas del grupo moto propulsor de Sapa, las torres de Escribano y el 'software' del sistema de misión de Indra, según un comunicado del Ministerio de Defensa.

Toque de atención

El anterior tirón de orejas de la ministra se produjo hace apenas semana y media, durante su discurso en la Pascua Militar. El programa 8x8 es un avance crucial para que el Ejército de Tierra renueve su flota de vehículos blindados.

Sin embargo, los innumerables retrasos en el proyecto han hecho que el coste se haya encarecido sobremanera. 

Fue en diciembre de 2022 cuando el consorcio dedicado a la fabricación de estos nuevos blindados envió los primeros siete 8x8 al Ejército de Tierra. Es una pequeña parte de los 348 que antes de 2027 tienen que estar ya a pleno funcionamiento en todos los destacamentos del Ejército.

Los 8x8 son unos vehículos de ocho ruedas a los que el Ejército de Tierra bautizó con el nombre de Dragones. Constituyen el núcleo tecnológico de un proyecto más ambicioso, la Brigada 2035, con el que la institución castrense revolucionará sus despliegues. Las condiciones de los conflictos cambian y también lo hacen el modo de afrontarlos.

Los Dragones serán unos vehículos que, gracias a sus capacidades, conformarán el núcleo de actuación de los militares. Además del blindaje y su capacidad ofensiva -de mayor o menor envergadura en cada uno de los cinco modelos-, constituirán un núcleo de comunicaciones e información entre los medios humanos y su entorno.

Por eso Robles ha vuelto a apremiar a los fabricantes debido a unos retrasos que en Defensa consideran ya inasumibles.