Un grupo de piratas informáticos próximo a los servicios de inteligencia de Rusia que ya ha perpetrado ataques contra España en otras ocasiones ha vuelto a actuar aprovechando las protestas de los agricultores.
La ciberbanda asociada al Kremlin ha actuado desde principios de esta semana colapsando las páginas web de cinco Parlamentos autonómicos y la del Gobierno autonómico de Murcia.
Según ha podido conocer EL ESPAÑOL de fuentes del ámbito de la ciberseguridad nacional, este fue un ataque coordinado y conjunto que comenzó el lunes. Los ciberdelincuentes apuntaron como objetivo a las webs de los Parlamentos de Navarra, País Vasco, Asturias, Murcia y Canarias.
Algunas de ellas seguían sin funcionar en la tarde de este martes, como la web de la Cámara de la Comunidad Foral.
El grupo de hackers en cuestión, que se ha jactado públicamente de haber perpetrado el ataque, se llama NoName057. En su canal de Telegram, esta ciberbanda próxima al Kremlin celebró haber asaltado los espacios virtuales de esas instituciones españolas.
Esta organización se ha atribuido la responsabilidad de múltiples ataques cibernéticos de los últimos meses en España. El domingo de las elecciones generales del 23-J, tal y como avanzó EL ESPAÑOL, atacaron la web del Ministerio del Interior, las páginas de Moncloa, del Instituto Nacional de Estadística (INE), la web de Correos y de la Junta Electoral Central, entre otras instituciones.
Días más tarde lanzaron un nuevo ataque masivo con la intención de colapsar principalmente páginas web de numerosos medios de comunicación, entre ellos este diario. Un mes atrás, en junio de 2023, el mismo grupo tumbó la web de Puertos del Estado con una agresión de similares características.
Noname057 ha estado también esta semana, tal y como revelan a este diario fuentes de Inteligencia, tras un ataque masivo cuya intención era colapsar distintas entidades públicas aprovechando la tesitura de la indignación del campo español.
Protestas
La protesta de los agricultores desbordaba este martes las grandes arterias de toda España, superando las previsiones. Miles de trabajadores del sector tomaban las principales carreteras de media España en una gran tractorada sorpresa: no formaba parte del calendario oficial de movilizaciones de las organizaciones agrarias, que han decidido replicar en nuestro país las que recorren Europa.
La publicación en la que ciberbanda se jactaba este martes del ataque.
Hay un denominador común en estos recientes ataques, y es el modo de tratar de colapsar todas esas páginas institucionales y privadas. La agresión cibernética se ha perpetrado mediante lo que se conoce como un ataque de denegación de servicio (DdoS).
Gracias a esta clase de amenazas virtuales, los hackers buscan colapsar una página web dirigiendo hacia ella una gran avalancha de tráfico. Así logran bloquearla y consiguen que nadie sea capaz de consultarla.
Fuentes del ámbito de la ciberseguridad del Estado sostienen que es una de las amenazas más fáciles de parar de cuantas emplean estos grupos de piratas próximos a la inteligencia del Kremlin. Sin embargo, a veces surten efecto dada la carencia de escudos protectores para determinados espacios digitales y cuando se producen de forma masiva y simultánea.
Alimentar protestas
Durante la intensa jornada, los ciberdelincuentes próximos a los servicios secretos de Vladímir Putin lanzaban un mensaje en su canal: "Miles de autónomos y pequeñas y medianas empresas españolas unidas en la Plataforma Nacional para la Defensa del Sector del Transporte se sumarán a las protestas campesinas".
"El lunes", prosigue el mensaje de los hackers, representantes de la asociación dijeron que ellos también quieren luchar por sus derechos y convocaron a un paro nacional indefinido que podría comenzar el sábado 10 de febrero. Decidimos no quedarnos al margen de los problemas de los españoles. Y ponemos un par de defensas en señal de solidaridad".
Esta clase de mensajes concuerdan con la estrategia del Kremlin de influir o contaminar estas protestas por toda Europa. Según señalan a este periódico fuentes de inteligencia, la narrativa que Putin trata de alimentar desde hace años es aquella que enfrenta a "patriotas contra globalistas". "Siempre aprovecharán todas las fisuras que puedan para hacer daño. Ven una ola subversiva como esta y se suben".