El espionaje ruso crece en España y centra su acción sobre los jóvenes, según un informe del CNI

En análisis anteriores, el apartado sobre las actividades de servicios extranjeros se plasmaba con referencias menos directas. Ahora, dada la convulsa situación internacional, no hay reservas a la hora de poner el foco en el país hostil.

Los espías rusos han intensificado su actividad en el ámbito académico para introducir sus ideas antieuropeístas y contrarias a la presencia de España en la OTAN en las jóvenes generaciones. Así lo ha detectado también el CNI y lo deja plasmado en su informe.

[España, nido de espías: un informe del CNI detecta un aumento de los servicios de inteligencia extranjeros]

"Rusia ha continuado apoyándose en herramientas híbridas tradicionales, como agentes de influencia, ONG y asociaciones prorrusas", señala." En el contexto de la guerra en Ucrania, Rusia ha dirigido sus operaciones a desestabilizar el apoyo de España a la OTAN. Asimismo, ha incrementado la explotación de su poder blando, principalmente en los ámbitos culturales, académicos y digitales, en actividades híbridas especialmente dirigidas a las jóvenes generaciones".

Al advertir cómo Rusia ha vuelto a desplegar sus tentáculos en territorio nacional, el CNI ha mejorado sus protocolos. La finalidad: "Mejorar la resiliencia ante posibles ataques procedentes de Servicios de Inteligencia extranjeros, independientemente de que se empleen métodos HUMINT [con agentes sobre el terreno] o de ciberespionaje".

En ese análisis, elaborado por diversos organismos gubernamentales, se advierte también de la intención de Vladímir Putin y sus servicios de Inteligencia de continuar "impulsando campañas de desinformación de manera oportunista".

Gracias a ellas, el Kremlin ha conseguido "manipular el apoyo de España a Ucrania" para lanzar estrategias que inoculen en la población un mensaje crítico con el apoyo que presta nuestro país a la Alianza Atlántica. En el contexto de la invasión de Ucrania, Rusia "ha dirigido sus operaciones a desestabilizar el apoyo de España a la OTAN". 

[Seguridad Nacional observa "un aumento" del espionaje ruso en España por la presidencia de la UE]

Esa estrategia se ha llevado a cabo a través de agentes sobre el terreno, pero también en el ámbito del ciberespacio. Ahí, "varios medios propagandísticos rusos o chinos han difundido operaciones de desinformación e influencia como un intento de injerencia en la opinión pública y en la toma de decisiones políticas en España", relata el informe.

En el mismo expediente, el CNI alerta de la intención de los espías rusos "de aumentar la presión sobre diplomáticos españoles" para que les filtren información reservada. Las actividades de las agencias de Inteligencia del Gobierno ruso están mayormente orientadas "a recabar información sobre la guerra en Ucrania".

La digitalización de las organizaciones públicas ha ofrecido a las agencias de inteligencia hostiles la posibilidad de emplear nuevos procedimientos de obtención de información de forma muy eficiente y segura. Una puerta abierta para las filtraciones. Por eso, señala el Centro en su expediente, "la actividad cibernética ofensiva se centra en las redes gubernamentales".

Injerencia rusa

Esto se ha traducido en un número significativo de víctimas en distintos organismos de la Administración pública de países europeos, incluido España. No en vano, Rusia ha desarrollado un "especial interés en acceder a las redes y sistemas de OTAN y UE" para anticiparse a los planes y a los movimientos de los aliados.

En el contexto de la presidencia rotatoria del Consejo de la UE, que España asumió el segundo semestre de 2023, el acceso a las redes nacionales era de gran relevancia para Rusia. Tal y como adelantó el pasado año EL ESPAÑOL, Seguridad Nacional alertaba de que Rusia había aumentado la actividad de sus servicios de espionaje en España con motivo de la presidencia de Pedro Sánchez de la Unión Europea.

Por eso en España, el Ministerio de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, el Ministerio de la Presidencia y el Ministerio de Defensa se han mantenido como "objetivos prioritarios de sus unidades de ciberespionaje".

En el ámbito del ciberespacio, varios medios propagandísticos rusos o chinos han difundido operaciones de desinformación e influencia "como un intento de injerencia en la opinión pública y en la toma de decisiones políticas en España y en el seno de la UE". 

Con el objetivo de aumentar el nivel de concienciación ante este creciente riesgo, desde el CNI se ha aumentado el número de actividades destinadas a la Administración pública y a las empresas de sectores estratégicos, tratando de alertar sobre los riesgos que estas prácticas conlleva y sobre la necesidad de incrementar las medidas de seguridad.

"El escenario geopolítico actual y, especialmente, la invasión rusa de Ucrania, ha elevado considerablemente el interés por obtener Inteligencia estatal de Occidente para tener una ventaja estratégica a nivel político, militar y diplomático. Así, la actividad de los Servicios de Inteligencia (SI) hostiles continúa siendo una amenaza para España y sus aliados", alerta el Centro.

En 2022, 27 diplomáticos rusos fueron expulsados de territorio español como parte de las medidas consensuadas con el resto de países de la UE tras la invasión de Ucrania. Estas expulsiones propiciaron que el entorno de Putin disminuyera significativamente su capacidad de operar sobre territorio europeo.  

Sin embargo, esa cifra ha vuelto a crecer en 2023. "Este aumento en el índice de actividad de los SI se debe principalmente al incremento de los ciberataques llevados a cabo por SI hostiles contra las distintas Administraciones y organismos públicos en España", señala el CNI en el documento.