Las autoridades españolas han impuesto una multa de 120.000 euros al buque de carga Tony Stark, operado por Alemania y con bandera de Antigua y Barbuda, por provocar un derrame de fuel en las aguas del Estrecho, cerca de la costa de Ceuta, cuando efectuaba unas operaciones de avituallamiento en la bahía.

El vertido se produjo el pasado 18 de julio a una milla de la costa de Ceuta y se detectaron regueros de fuel frente a la playa Benítez de Ceuta, las escolleras del puerto y en la playa de San Amaro, en el mar de Alborán.

El Tony Stark no puede abandonar el puerto de Ceuta hasta que los propietarios paguen una fianza de 120.000 euros.

De esta cantidad, 100.000 euros son por la contaminación producida y otros 20.000 euros para hacer frente a los gastos ocasionados en las labores realizadas por los medios navales y aéreos de Salvamento Marítimo.

Además del pago de esta fianza, se ha exigido al capitán un informe con las causas del accidente y las medidas correctoras para evitar episodios similares y la identificación de un domicilio en España para futuras notificaciones.

La Salvamar Atria, con base en Ceuta, así como las embarcaciones de la empresa local Ecoceuta retiraron la contaminación por este vertido con dispersión mecánica.

Por otro lado, la Capitanía Marítima ha desactivado este lunes el Plan Marítimo Nacional puesto en marcha por el vertido de fuel.

En un incidente similar, tres playas cercanas a la ciudad oriental de Valencia fueron cerradas la semana pasada después de que el combustible de un derrame quedara arrastrado por una franja de arena de dos kilómetros.