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El Cártel de Sinaloa utilizaba la habitación de un chalet en la localidad de Sant Andreu de Llavaneres (Barcelona) para realizar secuestros y torturas a otros presuntos narcotraficantes rivales de su organización. Así lo han descubierto la Policía Nacional y los Mossos d'Esquadra en una reciente operación que ha terminado con la detención de 14 personas, nueve de ellas de esta organización criminal de origen mexicano.

La operación ha estado comandada por la Sección de Secuestros y Extorsiones de UDEV Central de la Comisaría General de Policía Judicial en colaboración con investigadores de la policía catalana. Según detallan a EL ESPAÑOL fuentes de la investigación, esta organización llevaba apenas dos años instalada en Barcelona, donde han desembarcado de forma paulatina con este contingente.

La investigación comenzó este verano, tras dos denuncias del padre y de la mujer de un individuo de nacionalidad serbia y kosova. Los datos de la víctima llegaron a través de Interpol a Kosovo y Europol Italia. En ellas explicaban que habían secuestrado a su familiar en Barcelona y pedían un rescate de 240.000 euros. 

Días después, la familia se puso en contacto con los agentes para informar que habían realizado un pago en criptomonedas ante la presión que tenían y bajo la condición de volver a recibir pruebas de que la víctima estaba viva. En concreto, realizaron el pago de 32.000 dólares en un monedero virtual de criptomonedas, siguiendo instrucciones de la organización para dificultar el rastreo del dinero, pero en ningún momento recibieron noticias sobre la víctima y los secuestradores continuaban exigiendo nuevos pagos. 

Fuentes jurídicas al tanto de los hechos reconocen que el secuestrado podría tener relación con el mundo del narcotráfico, como la tienen quienes le atraparon. La víctima tenía 46 años. Trabajaba, presuntamente, para la organización y había viajado desde Italia a Barcelona para reunirse con algunos de los líderes de la red criminal.

El Juzgado de Instrucción número 2 de Reus ha mantenido el secreto de las actuaciones durante toda la investigación con el fin de no poner en riesgo ninguna de las gestiones que se estaban realizando y que han permitido la desarticulación de la organización criminal. Con el levantamiento del secreto, los agentes comunicaron a los familiares de la víctima su muerte y la localización de su cuerpo.

Los narcos asentados en Barcelona enviaron a la familia una fotografía para demostrar que ese individuo estaba en su poder. Lo tenían en el citado chalet de la localidad catalana, donde, según fuentes de la investigación confirman a EL ESPAÑOL, el hombre fue torturado durante días tras su secuestro en una habitación de esa vivienda.

Cuando los investigadores irrumpieron hace apenas unos días en la vivienda, los miembros del Cártel de Sinaloa ya habían acondicionado la habitación para que pareciese que nadie había pasado por allí. Era como si la habitación no existiera. Habían tapado los interruptores y los enchufes. Pese a ello, tras el registro la investigación ha podido acreditar las torturas que se perpetraban en esa estancia.

Uno de los cuchillos con los que torturaron a la víctima. Policía Nacional

En la casa hallaron bridas similares a las que habían utilizado para atar a la persona que habían secuestrado. También restos de sangre. Entre otros detalles, los agentes han logrado averiguar que los miembros de esta organización criminal tardaron entre 3 y 4 días en acabar con la vida de la persona a la que primero torturaron sin descanso.

Pese a haberlo asesinado, mantuvieron la farsa y seguían pidiendo el rescate a la familia. En el marco de la investigación, el pasado 5 de agosto los agentes localizaron el cuerpo sin vida de este hombre. En él se apreciaban claros signos de violencia, y ese encontraba en avanzado estado de descomposición, en una zona boscosa del municipio de Botarell (Tarragona). Para llevarlo hasta ahí emplearon el automóvil propiedad de la víctima.

Fruto de la investigación, los agentes determinaron que el hombre habría sido secuestrado por miembros de la organización criminal entre el 31 de mayo y el 2 de junioUn equipo especialista en ciberdelincuencia identificó diversas personas presuntamente vinculadas a la transacción y directamente relacionadas con el secuestro, y los investigadores encontraron indicios en el interior de un vehículo en el que había viajado de Italia a Barcelona y que estaba en el depósito municipal.ç

Envuelto en mantas

Los detenidos, vinculados al cártel mexicano de Sinaloa, están relacionados con delitos de tráfico de drogas a nivel internacional, así como blanqueo de capitales, secuestro y asesinato. La banda recibía paquetes de origen mexicano con metanfetamina impregnada en piezas de ropa y, una vez en Cataluña, hacían el proceso de extracción de las sustancias en un laboratorio.

Una de las armas intervenidas a la organización. Policía Nacional

Los detenidos vivían en el Maresme y en Barcelona, aunque la mayoría tenían una fuerte movilidad internacional hacia diversos países europeos y México. Las gestiones policiales permitieron desplegar un operativo policial en Barcelona, Sant Andreu de Llavaneres, Sant Cebrià de Vallalta y Cambrils (Tarragona), y entre los 14 detenidos está el presunto cerebro del secuestro y líder de la organización.

En las entradas y registros, los policías intervinieron armas de fuego, material tecnológico y dinero en efectivo, así como indicios relacionados directamente con el secuestro y asesinato del secuestrado. La víctima, de 46 años, trabajaba presuntamente para la organización y había viajado desde Italia a Barcelona para reunirse con algunos líderes de la red criminal.

El cadáver estaba descompuesto. No se puede determinar cómo murió, si extrangulado o asfixiado. Estaba envuelto en una manta unas sábanas cuando los investigadores lo encontraron.

El punto de unión de la operación es un ciudadano español también detenido que era el encargado de blanquear el dinero, era el experto en lavar el dinero a través de plataformas de criptomonedas. 

El cártel de Sinaloa lleva años intentando establecerse en España con distintas avanzadillas de algunos de sus lugartenientes y secuaces de menor rango que tratan de abrir nuevas vías de negocio para esta temible organización mexicana.

Según fuentes de la investigación, tenían ya cierta infraestructura que les permitía introducir las sustancias estupefacientes por el puerto de Barcelona, por mensajería y empleando otros métodos. No era la primera ocasión que lo intentaban.

Hace unos meses, lUnidad de Drogas y Crimen Organizado (UDYCO Central) y las jefaturas superiores de Canarias y de la Comunidad Valenciana desarticularon la infraestructura en España de esta organización al intervenir 1.800 kilos de metanfetamina en Valencia y Alicante, el mayor alijo de esta sustancia en España y la segunda mayor incautación de toda Europa.