El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón (Zaragoza, 1963), jamás imaginó la fama que iba a adquirir por la gestión del Gobierno de la pandemia del Covid-19. Todo el mundo sabe quién es.
Además de ver su rostro en camisetas, con el lema Fucking Master (que se podría traducir como "el puto amo"), tazas, chapas e incluso en un tattoo que se ha hecho un ciudadano valenciano, también tendrá una plaza con su nombre en Hinojos, un pueblo de Huelva de 4.000 habitantes.
En declaraciones a El ESPAÑOL, el alcalde de la localidad, el socialista Miguel Ángel Curiel, que gobierna con mayoría absoluta, asegura sentirse "muy identificado" con la forma de trabajar del científico y lo tiene claro. "El objetivo es hacerle un reconocimiento a todo el personal que ha luchado en primera línea contra el Covid y Fernando lo ha estado como el que más y, además, dirigiendo. Se lo merece".
La idea es aún muy bohemia, hay que pulirla, pero el equipo de Gobierno ya tiene el espacio elegido y quiere que a final de año el reconocimiento tenga nombre propio. La plaza es octogonal y en cada cara interior van a poner un azulejo en agradecimiento al personal que no ha parado de trabajar durante el confinamiento.
La plaza se llamará Fernando Simón y además en el centro tendrá una escultura, aún por definir, que reconocerá a estas personas que han estado luchando contra el coronavirus. El escultor que hará el monumento será Martín Lagares, natural del pueblo vecino La Palma del Condado.
Comunicado por carta
El equipo de gobierno ya se ha puesto en contacto con Fernando Simón por carta para informarle del reconocimiento que le quieren hacer a su figura y para pedirle autorización. "No vamos a utilizar el nombre de nadie sin saber si quiere que se utilice o no", pero el alcalde cree que la idea será de su agrado.
"De aquí a final de año ya estará terminada la plaza", ha asegurado el primer edil. También tiene claro que invitarán a su protagonista y que es el primer pueblo o uno de los primeros en brindarle un homenaje de este tipo a Simón por su labor al frente de la pandemia.
"Hinojos es un pueblo pequeño, humilde y yo me identifico mucho con la forma de trabajar de Fernando. Creemos que puede hacerse algo bonito", remarca Curiel, muy satisfecho con esta idea.
Cuatro casos
Huelva es una de las provincias menos afectadas por el Covid en España. En este municipio, cuatro personas han sido contagiadas por el virus y lo han superado con normalidad.
Así, una vez tengan el consentimiento del científico, la propuesta pasará por pleno aunque el alcalde ya asegura que se va a consumar. El PSOE gobierna en la localidad con mayoría absoluta, con seis concejales frente a los cinco del PP.
La oposición
Sin embargo, el portavoz del PP en el Ayuntamiento, Javier Payseo, no lo ve con buenos ojos. "No conocemos la propuesta y la pongo en cuarentena", pero ha dejado clara su postura: no está de acuerdo con que la plaza lleve el nombre de Fernando Simón. "También podría llevar el nombre de algunos de los técnicos de la Junta de Andalucía, que han hecho una gran labor".
Su grupo apuesta por un homenaje a estas personas que han luchado contra el Covid pero más a nivel local y andaluz. De hecho, el PP va a llevar al próximo pleno una moción para entregar la Medalla de Plata de la localidad a los sanitarios, a los agentes de la Policía Local del municipio y de la Guardia Civil, que han participado en las labores de prevención y seguridad. Ya se aprobó en el anterior esta insignia para Protección Civil.
"Que sea monopolizado no nos parece bien, hay que hacer una distinción a todos, no solo a Fernando Simón", refiriéndose al nombre en concreto de la plaza, asegura Payseo. Al respecto, ha insistido en "la gran labor" que ha hecho el Gobierno andaluz (PP-Cs) para frenar esta pandemia.
Fama
El rostro de Fernando Simón saltó a la fama cuando comenzó a sonar la palabra coronavirus y empezó a dar cuentas de su evolución en España. Desde entonces ha estado muy expuesto y sus palabras y sus gestos ha sido analizados al detalle, hasta cuando le dio el ataque de tos cuando se comió una almendra o cuando dijo que España no iba a tener "más allá de algún caso".
Su contagio de Covid, sus comparecencias, su peculiar voz, su currículum y sus formas pausadas, y hasta las de vestir, han dado bastante que hablar y han originado admiradores y detractores hacia su persona. Hasta han llegado a pedirle matrimonio en las redes sociales.
Entre los primeros, su propio hermano y Podemos, que propuso condecorarlo por su labor y, entre los segundos, algún vecino de Caspe (Zaragoza), el pueblo que lo vio crecer y que amaneció un día con pintadas "Gobierno asesino. Simón dimisión". También familiares de una mujer que falleció por coronavirus se querellaron contra él por, entre otros, un delito de homicidio imprudente, pero el titular del Juzgado de Instrucción número 11 de Madrid no la admitió.
El propio Simón asegura no sentirse molesto. "Para nada me molesta la fama, aunque cuando vas por la calle ya no es tan fácil moverse, pero estoy encantado", indicó.
Tampoco se mostró molesto porque haya gente que use su imagen para un negocio que les pueda parecer rentable, refiriéndose a la venta de las camisetas pero pidió que se donara un porcentaje a alguna ONG. El alcalde de Hinojos tampoco cree que lo esté cuando su nombre figure en un azulejo de la plaza de este pueblo onubense.