El consejero de Hacienda de la Junta de Andalucía, Juan Bravo, y el fontanero del PP andaluz, Elías Bendodo, estarán poco tiempo en doble función para el nuevo Partido Popular de Alberto Núñez Feijóo. Ambos han sido ascendidos a Madrid como vicesecretario del área económica y coordinador general del PP nacional, respectivamente.
Pero, a partir del 12 de junio, podrán ir haciendo la mudanza definitiva, ya que Juanma Moreno Bonilla medita convocar las elecciones autonómicas para esa fecha.
Según fuentes cercanas al presidente autonómico andaluz, "no se trata de un adelanto, sino de una anticipación técnica", ya que, tras el receso estival, el Parlamento tendría que ser disuelto a inicios de octubre, como muy tarde: las elecciones en 2018 se celebraron el 2 de diciembre. "Y eso significaría que, en realidad, habría sólo un mes del segundo periodo de sesiones, algo absolutamente inútil".
Pero hay dos motivos más para este adelanto "técnico". El primero es "el bloqueo al que Vox está sometiendo la acción del Gobierno", explican fuentes del PP andaluz. El pasado mayo, el partido de Santiago Abascal ya impuso el veto a la nueva Ley de Salud Pública que impulsaba el Ejecutivo de coalición entre PP y Cs. El pasado diciembre, la formación de derecha extrema amagó con bloquear el decreto de ayuda a las empresas. Y el pasado febrero ya anunció su intención de impedir la aprobación de la Ley de Economía Circular.
"Ésa es la norma más importante que tenemos entre manos, y no tendría sentido que Vox la vetara en la Mesa o en el pleno. Porque, además, perjudicará con ello a su supuesto caladero de votos, los agricultores y ganaderos andaluces", explican fuentes del entorno de Moreno. En todo caso, los populares comprenden que "en estas circunstancias, es absurdo alargar una legislatura casi muerta por las fechas con un Parlamento, además, bloqueado".
Por otro lado, este periódico ha podido confirmar la apuesta del propio Juan Bravo, hasta ahora consejero de Hacienda, de que "Andalucía no puede estar un año y medio sin Presupuestos, dada la situación económica actual". Según las fuentes consultadas en el entorno de la nueva voz económica de Génova, "si las elecciones no son en junio, no daría tiempo a tener las cuentas públicas de 2023 aprobadas en tiempo y forma".
Así que su influencia sobre Feijóo y el hecho de que el nuevo presidente popular lo quiere en Madrid trazando su estrategia de oposición, en un momento tan delicado para el país en lo económico, aconsejan a Moreno no demorar más la decisión. "El presidente Feijóo quería llevarse a todos los buenos... le he pedido tiempo y que me deje alguno", bromeaba Moreno al finalizar el XX Congreso del PP, hace cinco días.
Ahora, tal como confirman las fuentes internas del PP de Andalucía, "hay que esperar" a que sea explícito el bloqueo a la norma por parte de Vox. Y la fecha se hará oficial. Las fuentes del Ejecutivo autonómico consultadas por EL ESPAÑOL indican, en cualquier caso, que Juanma Moreno esperará a después de la Semana Santa para tomar la decisión.
Los cálculos
Tras el congreso extraordinario del PP en Sevilla, celebrado la semana pasada, los dirigentes de la nueva cúpula quisieron espantar el fantasma del adelanto electoral en la Junta: "Tenemos que ver cómo es el tirón, cuál es el efecto Feijóo".
Pero lo cierto es que ya no hace falta mirar más, si es que de verdad ése era un motivo para seguir esperando. El último barómetro del Centro de Estudios Andaluces (Centra), publicado este miércoles, otorgaba la victoria a Moreno con un 34% de los votos, lo que le supondría entre 43 y 44 escaños. Por tanto, en su máxima horquilla, aunque de manera muy ajustada, sumaría más que las fuerzas de la izquierda.
Es decir, el PP-A obtendría un enorme triunfo, duplicando sus actuales 22 escaños, aunque quedaría lejos de los 55 diputados que dan la mayoría absoluta. Pero esta victoria le bastaría incluso para no depender de Vox, a pesar de que los de Abascal (¿y de Macarena Olona?) también avanzarían sustancialmente, desde sus actuales 12 hasta 22 escaños.
En todo caso, a los populares le bastarían los dos diputados que aún obtendría Ciudadanos, siempre según este sondeo, para lograr una mayoría suficiente, similar a la obtenida por Isabel Díaz Ayuso en las urnas del 4-M del año pasado en Madrid. Y es que Juan Espadas, apuesta de Pedro Sánchez para Andalucía, sacaría peor resultado que su antecesora como líder socialista, Susana Díaz: el PSOE bajaría de 33 a 31 escaños.
Las izquierdas no alcanzarían ni sumando todos sus diputados a Moreno, ya que Unidas Podemos sólo podría alcanzar 10 escaños, en el mejor de los casos. Por otro lado, y Adelante Andalucía probablemente quedaría fuera del Parlamento.
La fecha del 12 de junio no es caprichosa, pues, más allá de los motivos ya reseñados. La convocatoria electoral, según las leyes andaluzas, ha de hacerse con 54 días de antelación.
"Vamos a tener una campaña rociera", confirmaba a este diario una fuente del PP-A. Efectivamente, para el 12-J la campaña comenzaría el 27 de mayo y la romería más concurrida de España se celebrará entre el 3 y el 6 de junio.
Para que los comicios caigan en domingo, el decreto de disolución del Parlamento debe firmarse en martes... que es el día en el que se celebran los Consejos de Gobierno en Sevilla. Y la próxima reunión de la mesa del Parlamento, en la que los populares dan por hecho que Vox sustanciará su bloqueo a la Ley de Economía Circular, se celebra el 20 de abril, martes.
Dos leyes y dos motivos más
Además, dos normas (y un par de conveniencias) constriñen la decisión de Moreno. La ley electoral andaluza, en su artículo 14.2, impide convocar entre el 1 julio y el 31 de agosto, por lo que el presidente de la Junta debía darse prisa en decidir si no quería verse atropellado por Vox.
Y el Estatuto de Andalucía, en su artículo 127.1, explica que la convocatoria electoral sólo se puede hacer "previa deliberación del Consejo de Gobierno"... pero, según las fuentes consultadas, "es hasta posible que ya esté deliberado y no se haya comunicado oficialmente", para poder reaccionar con celeridad.
Por otro lado, y a la vista de los sondeos, en el PP de Andalucía creen que "no sólo convendrá a la región, sino al presidente" ir pronto a las urnas. "Él, de verdad, querría agotar la legislatura, porque piensa que su imagen de estabilidad se vería reforzada, pero cuanto menos tiempo le demos a los rivales para prepararse, mejor". Y lo cierto es que Vox aún no tiene candidato... oficialmente.
Además, "el PSOE-A está en una crisis absoluta", añaden. Más aún con el Gobierno de Sánchez "empantanado con una inflación al 10%".
Este jueves se ha celebrado el último pleno antes de esas fechas. El siguiente ya será el 27 de abril. Y la presidenta del Parlamento, Marta Bosquet, de Ciudadanos, se ha despedido de sus señorías sugiriendo que ése ya no se celebrará, porque Moreno habrá disuelto una semana antes: "Por si acaso, ha sido un placer representarlos". Los diputados de la bancada liberal se han abrazado, deseándose una buena Semana Santa... y algo más.
"El ambiente era ése en el Parlamento este jueves, de cierre", apunta una fuente interna desde la sede, el viejo Hospital de las Cinco Llagas.