El presidente de la Junta de Andalucía en funciones y ganador de las elecciones autonómicas, Juanma Moreno, cree que no hay tiempo que perder. Cuando todavía no se ha constituido el nuevo Parlamento –será el próximo 14 de julio–, ya trabaja en la confección de su nuevo gobierno. El objetivo, según informan a EL ESPAÑOL fuentes del Ejecutivo andaluz, es acortar los plazos lo "máximo posible".
Aunque aún es pronto, ya han proliferado varias quinielas. Una pieza fundamental será el sustituto del que ha sido consejero de la Presidencia, portavoz y pieza clave de este Gobierno de PP y Cs, Elías Bendodo. El malagueño ya está centrado en sus nuevas funciones como coordinador general en el PP de Alberto Núñez Feijóo.
Moreno baraja el nombre de Antonio Sanz para suplirle, que ha sido mano derecha del propio Bendodo como viceconsejero de Presidencia, Administración Pública e Interior en esta legislatura.
Moreno y Bendodo mantienen una relación muy estrecha desde hace más de 25 años, pero ante el nombramiento del segundo en el congreso nacional del PP como coordinador general, el presidente de la Junta ya aseguró que su aliado no seguiría. Hace unos días, en una entrevista concedida a esRadio, lo confirmó: "Lamentándolo mucho para mí, Elías Bendodo no va a poder seguir en el Gobierno de Andalucía".
El malagueño sí se ha presentado como número tres por la provincia de Málaga a las elecciones autonómicas, pero no formará parte del Ejecutivo para centrarse en Génova al formar parte de la cúpula del partido.
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Moreno sí cuenta con el trabajo del consejero de Hacienda, Juan Bravo, que también fue nombrado vicesecretario económico del equipo de Alberto Núñez Feijóo. El presidente explicó que lo suyo es "una cesión en principio temporal".
Un veterano en el partido
Antonio Sanz es licenciado en Derecho y conoce perfectamente el partido y el funcionamiento de la Administración tras su labor como hombre de confianza de Bendodo en estos tres años y medio. Pero, además, su currículum lo avala.
El suyo es uno de los departamentos más relevantes en el Gobierno andaluz porque controla todas las cuestiones de seguridad y, también, las políticas migratorias. Además, Sanz fue delegado del Gobierno en la etapa de Mariano Rajoy como presidente y su gestión fue especialmente valorada. También fue mano derecha de Javier Arenas y secretario general del PP en su etapa.
Sanz es natural de Jerez y en el PP de Cádiz tuvo un papel muy importante. Ocupó durante dos épocas la presidencia provincial del partido. La segunda la culminó, precisamente, al ser nombrado viceconsejero de Presidencia para dedicarse en exclusiva a esta tarea.
El Gobierno, a finales de julio
En cuanto al resto del Gobierno, previsiblemente, Moreno contará con la presencia de los que han sido sus consejeros en esta legislatura, a los que premió dándoles un puesto de salida en las listas de sus respectivas provincias.
No obstante, el presidente andaluz, apenas 24 horas después de ganar las elecciones, tampoco descarta contar con miembros de Cs, incluso con el propio Juan Marín, idea que éste ya ha desechado. El nombre de la consejera de Empleo de la cuerda de Cs, la independiente Rocío Blanco, suena con fuerza.
Moreno ya ofreció a estos consejeros llevarlos en las listas. En cualquier caso, durante toda su campaña, el presidente ha insistido en que su equipo estaba engrasado para ponerse a gobernar tras la jornada electoral.
El primer hito tras estos comicios será la constitución del Parlamento andaluz de la XII legislatura, fijado en el decreto de convocatoria de las elecciones autonómicas para el jueves 14 de julio.
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En la misma, se elegirán a los miembros de la Mesa de la Cámara, incluida la persona que ostentará la Presidencia, que por primera vez en la historia de la autonomía recaerá en un diputado popular. En esta última legislatura la encarnó Marta Bosquet, de Ciudadanos.
A partir de su constitución, el Reglamento establece en su artículo 138 un plazo máximo de 15 días para que el presidente proponga un candidato a la Presidencia de la Junta, previa consulta a los portavoces designados por los partidos o grupos políticos con representación parlamentaria.
Ahí es donde el PP quiere acortar el plazo máximo previsto, que llevaría el debate de investidura hasta los días 29 y 30 de julio, para fijarlo a lo largo de la semana anterior. De esta forma, Moreno podría ya, como presidente electo, designar a su Gobierno para que empiece a funcionar en la última semana de julio.
Una de las primeras tareas del nuevo Ejecutivo será sin duda la elaboración del proyecto de ley de Presupuestos para 2023. Precisamente fue el motivo por el que justificó el adelanto de las elecciones, que este domingo le dieron una amplia mayoría absoluta.