Alerta en Sevilla por la sequía: prohibido el riego de calles y llenar piscinas para evitar cortes

Ni regar calles ni plazas ni llenar piscinas. La Empresa Metropolitana de Abastecimiento y Saneamiento de Agua de Sevilla (Emasesa) ha declarado este lunes  la alerta por sequía después de varios meses en situación de prealerta y cuando se prevé que los embalses que abastecen a su sistema bajen de los 268 hectómetros cúbicos acumulados.

Esta medida implica la prohibición del uso del agua para fines ornamentales o recreativos. De lo contrario, habrá multa. ¿El objetivo? Evitar cortes de suministro como sí ha ocurrido en la provincia en etapas de sequía anteriores.

En total, Emasesa da servicio a más de un millón de usuarios. Sin embargo, no es la única empresa que ha anunciado restricciones. Aljarafesa, compañía que abastece a 325.000 usuarios de 30 municipios de la provincia sevillana, ha propuesto a la Presidencia de la Mancomunidad de Municipios del Aljarafe la publicación en los próximos días de un bando en el que se anunciarán nuevas medidas para ahorrar en el consumo.

Entre esas medidas concretas se fija las mismas que en el caso de Emasesa: prohibir el uso de agua potable para el riego y baldeo de calles, plazas y recintos públicos o privados, zonas verdes y jardines y llenado de piscinas -salvo que dispongan de sistemas de depuración y recirculación-, entre otras.

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La fase de alerta implica la publicación de bandos municipales en los respectivos ayuntamientos de los municipios abarcados por los servicios de Emasesa. En ellos se instará a todos los ciudadanos, organismos, empresas y demás colectivos sociales a un uso racional, responsable y solidario del agua.

Esta fase supone, asimismo, la activación de la ordenanza municipal reguladora de las medidas excepcionales aplicables al abastecimiento domiciliario de agua potable como consecuencia de la sequía. El documento recoge la prohibición de los consumos de uso ornamental, recreativo y cualquier otro que no sea esencial, además de definir las posibles sanciones en caso de incumplimiento.

"Pasamos, por tanto, de las recomendaciones al momento de las prohibiciones de consumos innecesarios y que pueden repercutir en las reservas de agua necesarios para el abastecimiento", asegura al respecto hace pocos días el presidente de Emasesa y alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz.

Por tanto, los ayuntamientos empezarán a penalizar usos inadecuados del agua potable no acordes con la situación actual de las reservas.

Evitar cortes en el suministro

Con esta medida se persigue alargar las existencias de agua y evitar cortes en el suministro que se han tenido que aplicar en anteriores sequías, de manera que no afecte al consumo humano y se garantice la actividad de las empresas.

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Ello, sumado a la campaña de concienciación de ahorro de agua y al esfuerzo inversor por parte de Emasesa en la transformación digital de la gestión del agua, pretende conseguir más eficiencia y alcanzar el objetivo de reducir el consumo de agua a 90 litros por persona y día.

Desde la declaración de prealerta, el consumo de agua se ha reducido un 3% y la alerta implica la idea de reducir el gasto 5% acumulado -en el estado de prealerta se marca el objetivo de un 2% y en estado de alerta, un 5%-.

"Nos morimos de sed"

El presidente de la Junta, Juanma Moreno, alertó de la situación en su intervención en el congreso del PP de Sevilla. Moreno retó al Gobierno de Sánchez a invertir en obras hidráulicas en la comunidad porque "nos morimos de sed" y "el agua aquí es como el gas para Alemania".

Para ello, Moreno se comprometió a invertir la misma cuantía que el Gobierno para conseguir "soluciones para siempre" en materia de recursos hídricos, un bien escaso en Andalucía y del que dependen sectores como la ganadería, la agricultura o el turismo.

Por su parte, el secretario general del PSOE-A, Juan Espadas, le ha contestado al respecto en su rueda de prensa. Le ha apremiado a completar la ejecución de obras declaradas de emergencia por la administración autonómica en Andalucía para hacer frente a la situación de sequía, en vez de dedicarse a "llorar" y a "confrontar" con el Gobierno de Pedro Sánchez lanzando "bravuconadas".