Ramón Fernández-Pacheco (Barcelona, 1983) tiene experiencia en la política municipal. Fue alcalde de Almería entre 2015 y julio de 2022 y tenía todas las papeletas para repetir como candidato.
Pero una llamada del presidente de la Junta, Juanma Moreno, para darle una de las carteras con más peso de su mayoría absoluta —la que suma Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul— cambió su destino. Unas semanas después también lo hizo portavoz de su gobierno.
La política la ha vivido en su casa al ser nieto y bisnieto de alcaldes almerienses. En 2019 fue el primer edil más votado del PP en todas las capitales. Su nombre empezó a sonar entonces con más fuerza y, ante el compromiso de Moreno de limitar a ocho años el mandato de un presidente, muchos lo consideran un valor en alza y lo ven como su sucesor.
Preguntado por EL ESPAÑOL al respecto, Fernández-Pacheco sonríe y lo niega ladeando la cabeza: "Juanma Moreno no necesita sucesores", afirma. También ve a Alberto Núñez Feijóo como el próximo presidente de los españoles.
La bandera de la defensa del medio ambiente ha sido siempre de la izquierda. ¿Siente que Andalucía está siendo un mirlo blanco en la lucha contra el cambio climático de todas las comunidades?
Hoy en día enarbolar la bandera del medio ambiente es enarbolar la bandera de la responsabilidad. Apostar por la sostenibilidad significa asegurar las necesidades del presente sin comprometer las de las generaciones futuras, y eso es ser responsable. Además, tenemos un presidente que es un absoluto convencido de cuidar el medio natural, porque puede ser también una palanca de desarrollo económico. No obstante, lo que a él le gustaría es no ser el único que lo hiciera.
¿Qué va a suponer para Andalucía la nueva Ley de Economía Circular?
Es sobre todo una ley necesaria, porque la cultura de extraer materia y convertirla en un residuo es obsoleta. La ley apuesta por que los residuos, que antes eran un problema y cuya gestión en algunos casos resulta bastante cara, deje de serlo y se convierta en un subproducto que vuelva a formar parte de la economía.
"La economía azul supone 300.000 empleos y el año pasado su facturación superó los 17.000 millones"
¿Cree que los objetivos medioambientales de este Gobierno se podrán cumplir en una legislatura?
Algunos sí. Cuando hablamos del cuidado del medio ambiente, hay que tener en cuenta una serie de factores que no dependen de nosotros, como puede ser la sequía, que está avanzando de manera preocupante. Pero en materia energética nos hemos marcado ese objetivo.
Ahora mismo Andalucía produce el 56% de la energía eléctrica que consume, lo hace con energía renovable. Nos hemos marcado el objetivo de llegar al 75%. Creo que podemos conseguir este hito.
¿Eso de la Economía Azul qué es exactamente?
[Ríe] Es un concepto que viene acuñando la UE desde hace ya algún tiempo y va a formar parte de sus políticas estratégicas en los próximos años. Viene a representar a todo el sector que tiene que ver con el mar y los océanos.
En Andalucía la economía azul supone 300.000 empleos y el año pasado su facturación superó los 17.000 millones. Por ello, nos hemos lanzado a formular la primera estrategia de Economía Azul sostenible para crear sinergias positivas en el sector.
¿Cree que Andalucía finalmente acogerá alguna edición de la COP?
Andalucía tiene todos los ingredientes. No hemos vuelto a hablar con el Gobierno tras la negativa al considerar que la COP30 (2025) no podía celebrarse Europa porque no tocaba, pero no lo compartimos. El ejemplo más claro es que para acoger la COP29 se van a presentar la República Checa y Australia.
"No se puede plantear porque es injusto, cortoplacista y simplista es que hay que elegir entre agricultores y Doñana"
Nuestro ánimo no es politizar sino todo lo contrario, dijimos que no teníamos problemas con la fecha, que podría ser al año siguiente. Tenemos capacidad y ojalá lo podamos conseguir con el apoyo de todos, porque es bueno para todos.
¿Teme un 'boom' de las energías renovables y que explote la burbuja?
Yo creo que no. Es cierto que la UE y el Gobierno están acelerando mucho la instalación de estos proyectos, pero se trata de un boom que no va a la misma velocidad en todos los territorios. En algunas provincias es más acusada que en otras, porque la red eléctrica no es la misma.
En cualquier caso, es algo positivo si somos capaces de encajar estos proyectos en zonas donde sean viables. Si todos los que ahora hay en la Junta salieran adelante, estaríamos hablando de una ocupación que no llegaría al 0,7% del territorio andaluz.
¿Cómo describiría la situación actual de Doñana? Tras el acto del pasado miércoles y aunque el Gobierno haya anunciado esa lluvia de millones, ¿cree que su situación "política" se encalla aún más y seguirán los problemas sin solucionarse?
Doñana es sobre todo una maravilla de la naturaleza y una suerte para Andalucía que esté en nuestro territorio. No se puede convertir en un problema, ni mucho menos en un arma arrojadiza que los políticos nos tiremos a la cabeza cada vez que tercie el debate.
Nuestra mano sigue tendida. Creemos que lo mejor para el parque es un gran pacto político entre Junta y Gobierno, que después se tiene que hacer extensible a los ayuntamientos y a los agentes actores.
Y es precisamente porque queremos ese gran acuerdo, por lo que no entendemos la actitud del gobierno, que responde a nuestra invitación con este desprecio institucional, presentando un plan unilateral en el que no cuentan con absolutamente nadie, ni con el Consejo de Participación de Doñana, ni con los alcaldes de su propio partido.
¿Van a presentar propuestas para que se incluyan en el plan mientras esté en exposición pública?
Las formas del Gobierno de Sánchez no nos parecen adecuadas, pero eso no quiere decir que nosotros desistamos de nuestro empeño. Doñana todo lo vale y para el bien de Doñana, siempre vamos a estar. No negamos nada, así que por supuesto que vamos a estudiar el documento.
¿Han vuelto a hablar con los agricultores de la Corona Norte que piden la regularización de sus hectáreas?
Sí, y no son los malos de esta película. Estoy convencido de que ellos no quieren acabar con Doñana y si algunos partidos se empeñan en demonizarlos pues creo que están cometiendo una gran injusticia.
Pero, ¿qué solución se les puede aportar?
El problema es que hay un acuífero sobreexplotado, que suministra agua al parque y a varios núcleos urbanos. Nosotros apostamos por intentar sustituir esos aportes hídricos que tienen el resto de actores aportando agua en superficie y no del acuífero, para que del mismo se suministre a Doñana.
La Ley del Trasvase de 2018 podría ser una solución, pero no se ha cumplido. Lo que no se puede plantear, porque es injusto y cortoplacista y simplista, es que hay que elegir entre agricultores y Doñana.
Entonces...
La pregunta no es, ¿agricultores o Doñana? Sino, ¿cómo ayudamos a los agricultores sin perjudicar a Doñana? Y esto es posible, y habrá que hacer infraestructuras, invertir y llegar a grandes pactos y actuar, por supuesto, contra quien no cumpla la ley.
Yo todavía no he escuchado a nadie aportar una solución para Doñana. Creo que hay que empezar a hablar más del parque y no de los votos que nos pueda dar en un futuro.
"No indultaría a Griñán. Estaríamos lanzando el mensaje de que los políticos son capaces de perdonarse unos a otros por sus intereses"
Este 4 de diciembre ha sido especial para Andalucía, al celebrarse por primera vez el Día de la Bandera...
Es un acto de justicia. El 4 de diciembre de 1977 cientos de miles de andaluces salieron a la calle para pedir autonomía. A algunos, como a Manuel José García Caparrós, les costó la vida en esa España de primeros años de democracia y es de justicia que se le reconozca.
Se puede ser andalucista creyendo en España y sintiéndose orgulloso, pero los andaluces de 1977 no son los de 2022, afortunadamente. Hoy lidera muchos parámetros que marcan la calidad de vida. Andalucía era un Fórmula 1 sin piloto hasta que llegó Juanma Moreno.
¿Cree que la ley del 'sí es sí', la reforma de la sedición y la inflación le pueden costar el Gobierno a Sánchez?
El Gobierno de Pedro Sánchez representa un proyecto político absolutamente acabado, que está haciendo mucho daño a España. Ha vulnerado la separación de poderes, ha manoseado el poder judicial como nunca antes ningún presidente lo había hecho y juega con el código penal en función de sus intereses políticos.
Y mientras, un país, entre atónito e indignado, ve cómo está sobrepasando y se salta a la torera una serie de líneas rojas que eran infranqueables. Estoy convencido, ahora más que nunca, que el próximo presidente de Gobierno será Alberto Núñez Feijóo.
¿Cómo ve a Feijóo tras los debates en el Senado?
Alberto llega a la política nacional después de un importante bagaje autonómico, sus cuatro mayorías le dan un poso diferente del que hasta ahora tenía la política nacional. Ha cambiado el paso. Vivíamos pendientes de lo inmediato y él ha empezado a introducir un discurso más sosegado, más tranquilo y más responsable.
¿Cree que, si no hubiera habido ese cambio en el PP con las guerras internas que había entre Génova y Andalucía, Juanma Moreno hubiera tenido la mayoría absoluta?
Estoy convencido de que la mayoría absoluta la ha ganado Moreno a pulso. Ha demostrado que lo único que le importaba era Andalucía. Hay quien pudiera pensar que era el momento de que determinados líderes políticos andaluces se cobraran algún tipo de revancha y, sin embargo, Moreno ha demostrado lo contrario con la confección de las listas, de su gobierno y de los altos cargos. No creo que haya influido demasiado.
Si dependiera de usted, ¿indultaría a Griñán?
No. Estaríamos lanzando un mensaje muy peligroso a la sociedad y es que los políticos son capaces de perdonarse los unos a los otros en función de sus propios intereses.
¿Qué cree que va a hacer Sánchez en unos meses?
No lo sé. Si por algo se caracteriza es por hacer siempre lo contrario de lo que la responsabilidad espera de él y por ser capaz de hacer aquello que prometió no hacer jamás.
Como exalcalde de Almería, ¿cómo ve las municipales?
Estamos atendiendo a un cambio de ciclo político, que viene marcado por la mayoría de Juanma. El segundo paso será un buen resultado en las municipales y el tercer escalón será llevar a Feijóo a la Moncloa. Desde el PP se trabaja para elegir a los mejores candidatos.
"La unificación del voto hacia el PP es la única opción para desbancar a Pedro Sánchez. Pasó con Cs y estoy seguro de que pasará con Vox".
La oposición carga contra la alcaldesa de Marbella por la imputación de su marido. ¿Cree que su situación podría afectarles? ¿Finalmente, se presentará?
Tenemos que ceñirnos a lo que está probado. Hoy día no está investigada. Si esa situación cambiara, hoy por hoy no tenemos indicios de que vaya a suceder, habría que hacer una valoración diferente. Que tenga patrimonio no significa absolutamente nada.
Vox apoyó los presupuestos andaluces en su primer trámite. ¿A qué cree que se debe su cambio de estrategia? ¿Van a aceptar enmiendas de otros grupos?
Vox está en un proceso de buscar su espacio político, está claro que los andaluces y los españoles cada vez tienen más claro que para poder sacar a Sánchez de la Moncloa hay que unir al voto en torno al único partido que es capaz de aglutinar al centro derecha y este es el PP.
¿Cree que Vox ha tocado techo?
La unificación del voto es la única opción para desbancar a Pedro Sánchez, pasó con Cs y estoy seguro de que pasara con Vox. Esto inexorablemente va a llevar a Vox a un proceso en el que va a aminorar los apoyos.
¿Se ve como sucesor de Juanma Moreno?
No. Moreno no necesita sucesores.
Él ha dicho que no estaría más de ocho años, y así lo estableció también en el programa electoral del PP.
Ojalá incumpla ese compromiso. Es lo mejor que le puede pasar a Andalucía.