Todos los condenados por el caso ERE se encuentran ya en prisión, exceptuando a dos ex altos cargos y al expresidente andaluz José Antonio Griñán, que está a la espera de que un médico forense valore si su entrada en la cárcel es compatible con el tratamiento oncológico que debe recibir a causa de un cáncer de próstata.
Los otros dos penados a cárcel que no entrarán de inmediato son el exviceconsejero de Empleo Agustín Barberá, cuyo plazo fue aplazado hasta obtener un informe del médico forense al alegar su defensa hace semanas que también padece cáncer; y el ex director general de Trabajo Juan Márquez.
A este último el Supremo le rebajó la pena privativa de libertad a tres años y la Audiencia le da uno de plazo mientras se tramita su solicitud del indulto al Gobierno.
Los otros seis han ido entrando en las prisiones que han elegido desde el pasado jueves, que lo hizo la exconsejera de Hacienda Carmen Martínez Aguayo, hasta este lunes, que lo han hecho los últimos cuatro, unas horas antes de que se cumpliera el plazo por el la Audiencia de Sevilla.
[La exconsejera andaluza Carmen Martínez Aguayo, primera condenada de los ERE que entra en prisión]
Esta mañana lo ha hecho el que fuera consejero socialista de Empleo y Desarrollo Tecnológico José Antonio Viera en la prisión de Huelva para cumplir su condena de siete años y un día por el delito de malversación, según informa Europa Press.
Los otros tres han ingresado esta tarde juntos en la prisión de Sevilla I. En concreto, han sido el exconsejero socialista de Innovación Francisco Vallejo, que debe cumplir una pena de siete años y un día; el exviceconsejero de Innovación Jesús María Rodríguez Román, condenado a seis años de cárcel, y el ex director general de IFA/IDEA Miguel Ángel Serrano, quien tiene que cumplir una pena de seis años, seis meses y un día de prisión. De ellos son los únicos de los que se ha obtenido documento gráfico.
Este pasado domingo, el primer día del año, hacía lo propio el exconsejero de Empleo Antonio Fernández para cumplir su pena de siete años, once meses y un día de prisión por este mismo caso.
Griñán, a la espera del forense
De momento, el expresidente andaluz José Antonio Griñán no tendrá que ingresar para cumplir la condena de seis años de cárcel por el caso de los ERE hasta que la Audiencia de Sevilla reciba un informe médico del Instituto de Medicina Legal sobre el cáncer de próstata que padece.
Este giro de guion se produjo la semana pasada después de que su defensa presentara nueva documentación ante el tribunal alegando que padece un cáncer de próstata que no puede ser tratado en prisión.
En concreto, su abogado ha pedido la suspensión de la ejecución de la pena conforme al artículo 80.4 del Código Penal. El mismo dispone que los jueces y tribunales podrán otorgar la suspensión de cualquier pena impuesta sin sujeción a requisito alguno en el caso de que el penado esté aquejado de una enfermedad muy grave con padecimientos incurables.