El Gobierno andaluz se suma a las comunidades de Valencia y Murcia para comparecer ante el Consejo de Estado y presentar sus alegaciones al Plan Hidrológico del trasvase del Tajo-Segura ante el recorte del agua que se destina al consumo de las agriculturas del Levante español.
Para ello, al igual que sus homólogos Ximo Puig y Fernando López Miras, el presidente de la Junta, Juanma Moreno, ha enviado una carta al Consejo de Estado pidiendo audiencia para la comunidad andaluza. El fin es poder exponer sus alegaciones ante este "hachazo", en palabras de la consejera de Agricultura, Carmen Crespo, tras el Consejo de Gobierno.
La consejera se ha referido a los 105 hectómetros de agua que se recortarán del trasvase con el aumento de los caudales ecológicos. Ello supondrá "la pérdida de 15.000 empleos y de 25.000 hectáreas".
Por su parte, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, también ha solicitado audiencia, mediante otra misiva, pero en sentido contrario. Entre sus argumentos expone que "no se puede abusar más del Tajo" y que "la realidad del cambio climático obliga a cambiar las reglas de explotación" del trasvase.
"Ante este hachazo grandísimo no podemos estar ni callados ni cruzados de brazos". De ahí que la solicitud de comparecencia ante el Consejo de Estado haya sido una iniciativa incluida como punto de urgencia en el Consejo de Gobierno.
"Vamos a defendernos ante esta situación de injusticia por una decisión política". En concreto, Crespo la atribuye a "un pacto" con el presidente de Castilla La Mancha.
La consejera ha narrado que el punto de partida del trasvase Tajo-Segura es una sentencia judicial que obliga a preservar el caudal ecológico del Tajo y que para ello se estimó que con una cantidad de 6 metros cúbicos por segundo se podría dar cumplimiento a esa exigencia.
La iniciativa, ha explicado la consejera de Agricultura, se abordó en una reunión del Consejo Nacional del Agua de diciembre. Al respecto, había consenso entre las comunidades autónomas afectadas en asumir la medida, pero no así en la cantidad finalmente decidida para preservar el caudal ecológico del Tajo.
Tras rechazar la cifra de 8,6 metros cúbicos, Crespo cree que elevar el caudal protegido para restringir el agua trasvasada es "un jaque mate a la supervivencia del Levante español, de las frutas y hortalizas".
Cuestionada por el hecho de que las comunidades de Murcia y Valencia hayan presentado sus alegaciones al Consejo de Estado, Crespo ha negado diferencias y ha asegurado que se ha trabajado de "forma unida". Lo atribuye a que este martes ha retomado la actividad el Consejo de Gobierno.
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"Quien ha faltado a la verdad ha sido el Gobierno", ha afirmado la consejera de Agricultura, quien ha recriminado al Ejecutivo de la Nación aprobar el Plan Hidrológico del Tajo con una reserva de agua de 8,6 metros cúbicos.
Concentración en Madrid
De hecho, por este motivo, este miércoles se concentrarán frente al Ministerio para la Transición Ecológica agricultores de las provincias de Almería, Murcia y Alicante bajo el lema 'En el Levante, sin trasvase, desierto y paro'.
Una protesta a la que va a acudir el Gobierno valenciano en la persona de la consellera Isaura Navarro (Compromís), junto al secretario autonómico de Agricultura, Roger Llanes, y el secretario autonómico de Transición Ecológica, Francisco Candela. Por su parte, el Gobierno murciano estará representado por su presidente, Fernando López Miras, y el consejero de Agricultura, Antonio Luengo.