Con pañuelo palestino en el cuello ella, Teresa Rodríguez, la líder de Andelante Andalucía, y con camiseta en la que podía leerse 'orgullo andaluz' él, José Ignacio García, quien va a sucederle en el cargo, y citando a Chaves Nogales en su biografía sobre el torero Juan Belmonte.
Así se han intercambiado los trastos -como si se tratara de una alternativa- en la III Asamblea Nacional del partido celebrada en Jerez, donde Teresa Rodríguez ha consumado un nuevo paso atrás en la política tras abandonar en diciembre de 2022 el Parlamento andaluz.
Su papel en los mandos lo ejercerá a partir de ahora José Ignacio García nuevo portavoz nacional, aunque ella seguirá como coportavoz, sin desvincularse del todo para seguir aprovechando el tirón político que tuvo Rodríguez en su momento.
[La historia se repite: Teresa Rodríguez denunció el 'robo' en su despacho tras romper con Podemos]
No obstante, la política gaditana ha dado ánimo a sus compañeros a seguir adelante con este proyecto político de "obediencia absolutamente andaluza" y ha puesto el ejemplo de Cataluña, que ha convocado elecciones y ha sido capaz de parar los Presupuestos Generales del Estado (PGE): "Olé sus huevos y sus ovarios, que paran a un país", ha remarcado Rodríguez.
Todo ello para enlazar con la idea de que Andalucía se tiene que dar a valer. A su juicio, cuando los andaluces hagan eso -parar a un país- poniendo a las mayorías sociales en el centro, "la tierra va a temblar".
Rodríguez, en algunos pasajes de su intervención visiblemente emocionada, ha resumido estos diez años en política en tres pasos: el paternalismo del principio, la marginalidad antes de independizarse de Podemos y la purga definitiva cuando ella y ocho diputados fueron expulsados del grupo en el Parlamento.
En cualquier caso, ha insistido en que esta formación tiene que seguir adelante sobre todo para parar "el monstruo de las derechas" en Europa, aunque finalmente no se presentarán a las elecciones europeas, y echar a la derecha en Andalucía.
El objetivo de esta formación, con el nuevo liderazgo, es rearmarse para convertirse en la principal alternativa a la derecha en Andalucía, que quiere "venderla". Se ha mostrado segura de que su forma de hacer política, rechazando los privilegios, salvará a la organización.
Por su parte, José Ignacio García ha parafraseado a Chaves Nogales en su biografía de Belmonte cuando en uno de los pasajes del libro explica: "La empresa era superior a nuestra imaginación y estuvimos a punto de fracasar no por falta de dinero, sino de fantasía, que es por lo que se fracasa siempre".
[El TC da la razón a Teresa Rodríguez en su guerra contra Podemos e IU tras su expulsión]
Y lo ha citado para explicar un cierto paralelismo con su organización: "Nos han puesto todas las trabas del mundo, pero nunca nos han podido quitar la fantasía, la capacidad de soñar con una Andalucía nueva".
José Ignacio García ha explicado que no hoy continúan un camino, no empiezan nada para que esta herramienta política no solo concurra a las próximas elecciones andaluzas, sino que se "convierta en un partido para las nuevas generaciones". Ese, ahora mismo, es su principal objetivo.