Una puesta a punto. Eso es lo que quiere hacer el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, el próximo mes de julio con su gobierno. Sería en el ecuador de la legislatura, cuando se cumplen dos años de alcanzar la mayoría absoluta, y con la vista puesta ya en las elecciones autonómicas previstas para finales de primavera de 2026.
El presidente andaluz no es muy dado a los cambios, pero la salida de la exconsejera de Agricultura, Carmen Crespo, como número 2 en las listas del PP las pasadas elecciones europeas, le obliga a realizar lo que en san Telmo -sede de la Junta- llaman "ajustes".
Sin embargo, ya avisó de que serían "un cambio sereno", sin descartar hacer alguno más tras analizar el funcionamiento de todas las consejerías e incluso las delegaciones provinciales con el objetivo de reforzar aquello que puede funcionar mejor.
De hecho, la salida de Crespo de las filas andaluzas se produjo a principios de mayo y esta remodelación no se producirá hasta julio, una vez pasado también el debate que ha propuesto en el Parlamento el próximo 26 de junio para analizar la situación de la comunidad.
Desde entonces las competencias de Agricultura las asumió el consejero de Sostenibilidad y portavoz del Gobierno, Ramón Fernández Pacheco.
No obstante, desde el Ejecutivo andaluz son conscientes del peso que tiene el sector agrícola en Andalucía como para que una sola consejería asuma ambas materias. En estos días es cuando Juanma Moreno comenzará a pensar en el alcance de estos cambios, una vez pasada la campaña de las elecciones europeas, en las que Moreno ha recorrido más de 5.000 kilómetros.
De hecho, las consejerías han realizado informes sobre su gestión y los logros de cada área con el fin de que el presidente los analice y tome las decisiones, que son postestad suya en exclusiva y que solo consulta con su equipo más cercano.
Desde el Ejecutivo andaluz insisten en que no van a ser profundos, sino que se tratará más bien de una reordenación de algunas competencias. En las quinielas está la de Turismo, Cultura y Deporte, con el fin de potenciar más el ámbito cultural.
También podría incluirse en esta quinielas la Consejería de Salud, cuya responsable, Catalina García, es el blanco de las críticas de la oposición y la que más frentes abiertos tiene como las listas de espera o el polémico fichaje del exgerente del SAS por una aseguradora privada.
Fomentar el perfil político
El objetivo también de estos cambios es potenciar en lo que queda de legislatura el perfil político de los consejeros, sobre todo de los que lo tienen más marcado, con el fin de alcanzar una nueva victoria en las próximas elecciones.
Moreno se muestra confiado, sobre todo tras ganar por primera vez el PP en Andalucía en unas elecciones europeas y completar el 'póquer' de victorias electorales tras encadenar triunfos en las autonómicas de junio de 2022, las municipales de mayo de 2023 y generales de julio de 2023.
Por el momento, el tradicional granero de votos socialistas que era Andalucía ha dejado de serlo. De hecho, aquella noche Moreno se apropió del eslogan que el PSOE tantas veces usó durante sus más de 37 años de gobiernos socialistas: "Es el partido que más se parece a los andaluces".
Aunque también lanzó un mensaje en clave interna, que cara también a estos cambios que quiere llevar a cabo el próximo mes de julio. "Este resultado implica más responsabilidad y compromiso de estar más cerca y trabajar todavía más por los andaluces".
A su vez, Juanma Moreno quiere aprovechar las horas bajas en las que se encuentra el PSOE andaluz, con su líder, Juan Espadas, cuestionado por los críticos tras los resultados del pasado domingo y en el punto de mira de Ferraz. No obstante, de momento la dirección federal no moverá ficha y Espadas ya anunció que será el candidato en las citadas elecciones de 2026.