Un preso de la cárcel de Botafuegos, en Algeciras, se suicidó este domingo en su celda. Los funcionarios lo encontraron, con una sábana atada al cuello, cuando hacían el recuento de internos. Se trata, señalan fuentes del sindicato penitenciario Acaip, del muerto número 36 en solo seis años.
Según dicha organización, este alto número de muertos en dicho presidio se debería a falta de personal en la plantilla de funcionarios. Además, lo achacan a "la masificación de reclusos; una deficiente atención sanitaria; presos con patologías mentales; y toxicomanías no tratadas adecuadamente".
El último episodio de este rosario de muertes tuvo lugar el pasado domingo. Detallan desde Acaip que, a las nueve de la noche, cuando se hace el recuento de reclusos, encontraron a uno de ellos con una sábana atada al cuello en su celda.
El hombre, español de 39 años y con antecedentes previos, había estado en prisión hacía solo dos meses. Había vuelto por otra condena y arrastraba un historial de problemas mentales, añaden.
"Tenía tratamiento psiquiátrico, la dirección del centro de Algeciras pidió su traslado al Psiquiátrico Penitenciario de Sevilla e incluso también a la Unidad de agudos de psiquiatría en el hospital de La Línea de la Concepción", señalan desde Acaip. Se denegó en ambos casos, añaden.
Sin psiquiatras
Según este sindicato, "la prisión de Algeciras, también sufre el mismo mal endémico que el resto de cárceles españolas, donde no se dispensa una atención sanitaria adecuada, no cuenta con subdirector médico".
Además, señalan que, de nueve médicos que debe tener el penal, solo hay dos disponibles. "La relación de puestos de trabajo no contempla la figura del psiquiatra, a pesar de que casi 600 internos de unos 1.100 toman medicación psiquiátrica a dosis elevadas, el preso que pide ser tratado de su adicción a la toxicomanía no es tratado o no se le trata adecuadamente porque no hay profesionales suficientes", se quejan.
Así, "en menos de seis años la cifra de fallecidos solo en la prisión algecireña asciende a 34 presos, en su gran mayoría por sobredosis y suicidios", indican desde Acaip. Y no suman ahí, señalan las "múltiples tentativas de suicidio".