La cabalgata municipal de Valencia congregó este martes a cientos de personas en la Plaza del Ayuntamiento. Los propios vídeos y fotos de los asistentes, así como la retransmisión de la televisión pública À Punt, recogieron cómo la comitiva de los Reyes Magos aglutinó a multitud de asistentes en el enclave.
Se trataba de una cabalgata "secreta", según presumió la organización con el objetivo de impedir, precisamente, las aglomeraciones. Pero la ausencia de un itinerario oficial no impidió la asistencia masiva a la plaza de referencia de la ciudad.
A tal circunstancia contribuyó el hecho de que se encontrara abierta. El Ayuntamiento de Joan Ribó (Compromís) cerró los accesos el pasado 31 de diciembre para impedir concentraciones por la celebración de la Nochevieja, pero no hizo lo propio para la noche de este 5 de enero.
El resultado fue la asistencia masiva de personas justo el día en que la Comunidad Valenciana alcanzó cifras récord de muertes y contagios por la Covid-19. Los datos anunciados por la Conselleria de Sanidad reflejaron 85 fallecimientos y 3.930 casos en las últimas 24 horas.
La portavoz del PP en el Ayuntamiento de Valencia, María José Catalá, cargó contra el Ejecutivo local. "La planificación de medidas de protección ha sido muy precaria e irresponsable por parte del Ayuntamiento", denunció.
El PP considera que, si bien el itinerario de la cabalgata se desconocía, "sí que se sabía que llegaría a la plaza del Ayuntamiento, lo que ha provocado la concentración de gente".
"Esta discusión sobre la cabalgata lleva meses en marcha, pero ha sido la cabezonería del alcalde y su equipo de gobierno lo que ha provocado este ejercicio de irresponsabilidad en una semana negra en la que en la ciudad de Valencia hemos sufrido muchas muertes", denunció Catalá.
Cs pide dimisiones
El portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Valencia, Fernando Giner, pidió la dimisión del concejal de Compromís, Carlos Galiana.
"Después de leer las declaraciones de la vicealcaldesa, Sandra Gómez, en las que manifiesta que pidió que anulasen la cabalgata de autobuses en la Plaza del Ayuntamiento y que el señor Galiana no hizo caso, y sabiendo que dentro de las competencias de la vicealcaldesa y de su partido está la delegación de la Policía Local, entiendo que el señor Galiana ha actuado por libre y a última hora y que ha provocado la lamentable. Galiana tiene que dimitir", aseveró Giner.
"Ribó está sometiendo a un ridículo continuo a la ciudad de Valencia y ayer, además, provocó una situación muy peligrosa, puso en riesgo la salud de las personas", agregó el portavoz naranja.
Bronca autonómica
Lo ocurrido también desató un enfrentamiento político a nivel autonómico entre el portavoz socialista del parlamento valenciano, Manolo Mata, y la vicepresidenta del Gobierno autonómico, Mónica Oltra.
"Creo que lo mejor es callar", tuiteó el primero, en aparente alusión a las restricciones que solicitó este martes Compromís. La formación propuso un confinamiento de 14 días en la autonomía que fue rechazado por los socialistas. Por contra, en Valencia no lograron impedir una gran concentración en la principal plaza de la ciudad.
La vicepresidenta valenciana no dudó en contestar al socialista: "Pues no callamos, ¡esto es incomprensible! no podemos callar en la situación de gravedad en la que estamos", replicó Oltra, que después se enzarzó también con la consellera de Sanidad, la socialista Ana Barceló.
"Esta imagen y sus consecuencias eran evitables si se hubieran cumplido las recomendaciones de Sanidad. Debía evitarse a toda costa la concentración de personas. Lamentable", criticó la socialista, a quien Oltra replicó que fue precisamente su departamento quien permitió la celebración de cabalgatas. "Sí, lamentable. Y también evitable, consellera", respondió a su compañera de Gobierno junto a una captura con las actividades permitidas.
La cabalgata de la Navidad de la Covid-19 será recordada por el arrojo de culpas en lugar de caramelos y por la no asunción de responsabilidades. El alcalde Joan Ribó optó por guardar silencio.