Alfonso Rus era empresario, directivo de fútbol y político, por ese orden. Una especie de Jesús Gil conocido por su locuacidad y que nunca ocultó el dinero y la fama que le rodeaba. Su obsesión era presidir el Valencia CF y para ello buscó protagonismo y financiación desde un modesto equipo de Segunda B.
La grabación de una declaración en el juzgado del caso Imelsa ha confirmado, nueve años después de que la Fiscalía Anticorrupción presentara la denuncia, que Alfonso Rus, el controvertido expresidente del PP de la provincia de Valencia, recurrió a empresas a las que adjudicó contratos millonarios para financiar a su equipo de fútbol, el Olímpic de Xàtiva.
El representante legal de Inelcom, una empresa puntera del sector de la tecnología con sede en Xàtiva (Valencia), ha reconocido generosas aportaciones al club, por valor de más de 100.000 euros, mientras la Diputación de Valencia cocinaba un contrato para adquirir bombillas leds. Inelcom obtuvo unos beneficios de al menos 15 millones de euros, según la Guardia Civil.
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Además de presidente de la Diputación, Rus era el alcalde de Xàtiva desde 1995 y negoció personalmente las donaciones de los empresarios para que el Olímpic subiera de categoría como paso previo para hacerse con el control del club de Mestalla.
"Alfonso Rus habló con Vicente Quilis –propietario de Inelcom– y le pidió colaboración porque su misión era elevarlo a Segunda A", declaró el pasado mes de diciembre el representante de Inelcom, según consta en la grabación a la que ha tenido acceso EL ESPAÑOL.
En este sentido, aclaró que tras la petición la empresa consignó 80.000 euros más IVA, una aportación económica "extraordinaria" para financiar las aspiraciones del equipo de quien era en ese momento alcalde y presidente de la Diputación de Valencia.
Caso Imelsa
Para ello se hicieron dos facturas con apenas unas semanas de diferencias, entre el 14 y el 28 de mayo de 2012, justo cuando la Diputación de Valencia seleccionó a Inelcom como proveedor de bombillas led en los 266 municipios de la provincia.
"Se hace esa dotación económica por valor de 80.000 euros, pero por dos cómputos de contabilidad porque nosotros no tenemos, digamos, un presupuesto destinado de esa cuantía. Lo hacemos de forma extraordinaria para que compute en dos ejercicios para nosotros", afirmaron desde Inelcom.
Además de lo llamativo del importe, también destaca el hecho de que el dinero se abone en dos facturas correlativas para temporadas diferentes justo cuando se producen hitos importantes de las licitaciones públicas que, nueve años después, se siguen investigando.
Al parecer, el club de fútbol de Rus decidió cuándo y cómo facturar. "El Olímpic emite la factura cuando ellos consideran", reiteró Inelcom en el juzgado.
Alfonso Rus en una imagen promocional de 2013 del Olímpic de Xàtiva.
Según apuntó la Guardia Civil en un informe incluido en el sumario, el dinero sirvió para el enriquecimiento personal de Rus, pagar a los jugadores en metálico y financiar la promoción y organización del partido que disputaron el Olímpic y Real Madrid por la Copa del Rey, en diciembre de 2013.
Sobre este partido, Inlecom, que ha realizado diversos trabajos de tecnología en el Santiago Bernabéu, reconoció que adquirieron 15.000 euros en entradas para el partido a petición de Rus.
"Cuando el Real Madrid toca en el sorteo de la Copa de Rey contra Xàtiva, pues de alguna forma nos sentimos también con la necesidad ética de hacer una colaboración porque el Ayuntamiento tiene que montar lo que son las graderías".
Así, Rus buscó empresas para que "compren entradas y nosotros compramos para nuestros trabajadores" y "fueron al partido de fútbol" tras asignar una "dotación de 15.000 euros". El partido permitió a Rus situarse entre directivos y la élite del fútbol español antes de presentar su propuesta para presidir el Valencia CF.
La filtración de multitud de grabaciones contando dinero procedente de comisiones y la posterior operación policial que acabó con su detención y defenestración en el PP frustró todos sus planes.
Las bombillas
Inelcom está imputada como persona jurídica en el Caso Imelsa por un supuesto delito de cohecho y fue una de las primeras empresas en ser vinculada los negocios de Alfonso Rus. Inexplicablemente, el juez no había tomado declaración a la empresa hasta ahora.
La grabación de la declaración refleja cómo la Fiscalía se interesó durante el interrogatorio por el contrato de las bombillas de la Diputación, vinculado a estos pagos, según consta en los informes policiales.
"Cuándo ustedes hacen el pago al Olímpic están optando a una adjudicación, ¿no hay un conflicto ético en la empresa?", preguntó el fiscal Anticorrupción, a lo que Inelcom respondió con un tajante "no".
A continuación, la empresa puntualizó que colabora con otras entidades sociales o culturales del municipio y defendió su papel en todo el proceso administrativo y su sometimiento a las reglas públicas de contratación.
Pero la sospecha recae en la coincidencia de los pagos y el proceso de licitación pública. El primer pago de Inelcom al Olímpic se produjo el 14 de mayo de 2012. Dos días después, el 16, se publicó la licitación de las bombillas en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP).
Alfonso Rus en una rueda de prensa celebrada en 2014.
A continuación, el 28 de mayo se realizó el segundo pago al club y días después, el 1 de junio de 2012, la mesa de contratación abrió los sobres de las ofertas presentadas. Inelcom fue la gran beneficiada del proyecto.
Rus participó directamente en la preparación de este contrato, en ese momento la mayor adjudicación aprobada en España para sustituir bombillas convencionales por luces led de menor consumo, que parecía hecho a la medida de Inelcom.
El sistema de adjudicación era muy particular. La central de compras de la Diputación canalizaba los encargos y ponía a disposición de los ayuntamientos cinco empresas para que compraran las bombillas. Cada municipio podía escoger una empresa, pero sorprendentemente Inelcom, pese a no contar con experiencia previa en este sector, fue la preferida de los alcaldes.
El primer juicio
A la espera de que el juzgado tome una decisión sobre esta pieza separada del caso, el próximo 23 de enero arranca en la Audiencia de Valencia el primer juicio del caso Imelsa en el que Rus se sentará en el banquillo de los acusados, siete año después de la Operación Taula.
El expresidente del PP en Valencia se enfrenta a 12 años de prisión por supuestamente pagar con dinero de la Diputación de Valencia la nómina del capitán del Olímpic de Xàtiva, entre otros delitos.
El jugador era Miguel Ángel Mullor y, según diversas fuentes, negocia estas semanas un acuerdo para incriminar a Rus a cambio de una rebaja de su condena.
Anticorrupción atribuye a los supuestos cabecillas de la trama los delitos de pertenencia a organización criminal, un delito continuado de malversación de caudales públicos, de prevaricación administrativa y de falsedad en documento oficial cometido por funcionario público.