La portavoz nacional del Bloque Nacionalista Galego (BNG), Ana Pontón, ha pedido este lunes al Gobierno central y a la Xunta de Galicia un confinamiento domiciliario de 15 días en caso de que en los próximos días "no se consiga aplanar la curva", una medida "que permitiría salvar vidas".
"A nadie le gusta el confinamiento, es una medida muy dura, pero hay que ponerla sobre la mesa cuanto antes si los datos no mejoran de forma sustancial e inmediata", ha planteado Pontón en una rueda de prensa ofrecida en el Parlamento de Galicia.
La líder nacionalista entiende que tanto el Gobierno central como el gallego deben barajar esta alternativa, ya que la actual escalada de contagios, ingresos en unidades de cuidados intensivos y muertes "no es asumible".
"Si la curva no empieza a descender ya, desde el BNG pensamos que hay que ser valiente y contundente y apostar por un confinamiento de dos semanas, ampliable en caso de ser necesario", ha sentenciado.
Pontón también ha insistido en que "la dicotomía entre salud y economía" es "una falacia", toda vez que "cuanto antes se controle la crisis sanitaria, antes se puede reactivar la economía", un hecho "avalado por estudios académicos" que demuestran que "con medidas duras el coste en vidas es menor y la economía sufre la mitad".
"Vemos el desastre del enfoque economicista de 'salvar la Navidad', porque no salvó la economía y, por la contra, disparó la tercera ola, impactando de lleno en la economía y el empleo", ha proseguido.
Además de "superar las medidas blandas", la líder nacionalista pide que, de decretar un confinamiento domiciliario, "se habiliten ayudas para mantener el empleo y la actividad económica durante el tiempo que duren las restricciones".
El BNG ya había apostado por el confinamiento domiciliario el pasado mes de noviembre, en pleno pico de la segunda ola, cuando pidió que esta medida se aplicase "cuanto antes" ante una pandemia "al borde de descontrol" en la comunidad gallega.