La mayoría absoluta del PPdeG en el Parlamento de Galicia aprobará este martes con el rechazo de la oposición la modificación de la Ley de Salud de Galicia, que permite decretar confinamientos o cuarentenas obligatorias, limitar las interacciones sociales y que prevé multas de hasta 60.000 euros por negarse a ser vacunado.
El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, lleva meses defendiendo esta normativa como "la primera ley de pandemias de España", toda vez que permitirá a la autonomía aplicar determinadas restricciones sin estar bajo el paraguas del estado de alarma, lo que para la oposición supone "restringir derechos constitucionales" con "un estado de alarma permanente".
En concreto, este texto establece una sanción de entre 1.000 y 3.000 euros por "la negativa injustificada a someterse a medidas preventivas, consistente en la vacunación o inmunización prescrita por las autoridades sanitarias, de acuerdo con lo establecido en esta ley".
Sin embargo, y siempre en cuando la autoridad sanitaria competente estime que la negativa a recibir la vacunación "suponga un riesgo o un daño grave para la salud de la población", un ciudadano podría recibir una multa de entre 3.001 y 60.000 euros.
Estas mismas multas se podrán aplicar ante la negativa de un ciudadano a someterse a una prueba PCR o a cumplir una cuarentena obligatoria, aunque será la autoridad la que determine si este hecho es merecedor de la sanción leve -de hasta 3.000 euros- o grave, de hasta 60.000 euros.
El tramo más alto de multas, de entre 60.001 y 600.000 euros, se reserva a situaciones que supongan un riesgo "muy grave" para la salud de la población, y podría conllevar también la prohibición de percibir ayudas autonómicas o locales entre uno y cinco años o el cierre temporal de un establecimiento por ese mismo periodo de tiempo.
Otros de los supuestos que la ley sanciona son la participación en fiestas en las que no se cumplan las restricciones vigentes, el incumplimiento de los horarios de apertura y cierre de locales o incluso que el propietario de un establecimiento no garantice el cumplimiento de las normas sanitarias en su interior.
En todo caso, durante el debate de la iniciativa, cuya votación se producirá esta misma tarde, la encargada de defender la proposición de ley, la diputada popular Encarnación Amigo, ha defendido que "la supuesta obligatoriedad de las vacunas" no es tal, sino que se refiere a que la autoridad sanitaria "podrá sancionar en circunstancias muy concretas".
Núñez Feijóo había enviado en su momento al Gobierno central una propuesta de modificación de la Ley Orgánica de Salud Pública para evitar la "inseguridad jurídica" provocada por el estado de alarma, con casos como la anulación del cierre de la hostelería en el País Vasco.
La oposición
Esta modificación de la Ley de Salud de Galicia ha sido duramente criticada por las fuerzas de la oposición, con el diputado del PSdeG Julio Torrado tachándola de "dislate jurídico" que pretende "recortar derechos constitucionales a través de una ley autonómica que busca sustituir al Congreso y al Senado".
"Esta ley es un reglamento sancionador que buscaba resolver cuestiones del día a día que se ha pasado de frenada y tiene una falta de rigor tremenda: es demasiado agresiva y pretende instalar un estado de excepción permanente, exista o no pandemia", ha sentenciado.
Mientras tanto, la parlamentaria del BNG Iria Carreira ha criticado la fórmula escogida para tramitar la ley: en lugar de ser presentada por la Xunta de Galicia la ha propuesto el grupo parlamentario del PPdeG, un movimiento "que busca evitar los controles y los informes a los que se somete una ley propuesta desde el Gobierno".
En concreto, la diputada nacionalista se ha referido al estudio de género de esta ley, que alerta de que, al prever la prohibición de acceso a ayudas públicas a las personas sancionadas, "podría impedir a una víctima de violencia machista recibir ayudas" si ha sido multada de acuerdo con la Ley de Salud.
Manifestación
La modificación de la Ley de Salud de Galicia también ha levantado una gran polémica entre grupos negacionistas: el pasado sábado cientos de personas de toda España acudieron a una manifestación en Santiago convocada por el colectivo Policías por la Libertad con el lema "No a la ley Auschwitz", toda vez que entiende que esta nueva norma creará una suerte de "campos de concentración" para personas infectadas.
Esta misma mañana se han congregado ante el Parlamento de Galicia decenas de negacionistas que protestaron contra la ley con carteles con mensajes como "la televisión es el virus", "con el pueblo o cómplices" o "Feijóo, no te enteras: la Constitución Española, ley de rango mayor".
En ambas protestas se vio a manifestantes que no portaban mascarilla o que la llevaban bajada.